Para compostar. Descarga de residuos orgánicos para transformar en compost en la planta de Lapatx.
Servicios de Txingudi (STTZ) ha elaborado un decálogo de medidas que implantará a lo largo de 2013, con el objetivo de incrementar los niveles de reciclaje en la comarca y de animar a los ciudadanos a separar más y mejor los residuos. Las medidas van a ir dirigidas, fundamentalmente, a dos áreas de actuación: profundizar en la recogida de materia orgánica y mejorar la recogida selectiva en las zonas urbana, rural e industrial.
La empresa pública se ha visto en la necesidad de poner en marcha estas medidas, «a la vista de que en los últimos tres ejercicios, los niveles de reciclaje se han quedado estancados», señalan desde STTZ.
La primera medida que acaba de ponerse en marcha es la de la ampliación del compostaje doméstico, en Irun y Hondarribia. En la actualidad, más de 700 familias -que disponen de jardín o huerta- fabrican compost para su propio consumo en jardinería u horticultura. Esta iniciativa se va a tratar de extender ahora a las cerca de 2.500 viviendas susceptibles de poder realizar esta actividad.
Contenedor marrón
La segunda medida está centrada en el contenedor marrón, que está previsto que llegue a toda a la comarca en el mes de abril. Servicios de Txingudi ampliará la experiencia de este contenedor para residuos vegetales (cocinados y no cocinados), realizada ya en seis barrios de Irun y Hondarribia. El objetivo es que participen al menos 6.000 familias.
En este mismo apartado de materia orgánica, STTZ tiene intención de prestar especial atención a los denominados 'grandes generadores' (fruterías, floristerías, centros comerciales y supermercados, comedores de colegios, talleres, hospital, restaurantes). En estos casos, la recogida se hará en función de dónde estén ubicados y del volumen que generen.
En cuanto a la mejora de la recogida selectiva, la primera medida que se pondrá en marcha será el 'Plan anual de caracterizaciones de contenedores', mediante el cual se estudiarán varios contenedores de resto (verdes) de forma aleatoria. Viendo qué porcentaje de materiales reciclables aparecen, se podría identificar el nivel de colaboración en la separación de residuos. Los resultados obtenidos con este plan permitirá informar a los vecinos de una zona concreta, cuyos contenedores verdes hayan sido estudiados, respecto a los niveles de separación que se están llevando a cabo. En la misma línea, está previsto realizar cálculos de reciclaje por barrios, polígonos industriales, etcétera.
Servicios de Txingudi tratará de identificar, por otra parte, aquellos puntos en los que se detectan malos usos de las islas de contenedores (por ejemplo dejando residuos fuera) así como otras deficiencias que pudieran darse (contenedores saturados, etc.), con el objetivo de mejorar la calidad de los puntos de recogida.
Etiquetas inteligentes
Este año está previsto, asimismo, realizar una experiencia piloto con las llamadas TAG, unas etiquetas que se adhieren a las bolsas de basura y que permiten asociar a un ciudadano con cada bolsa que deposite en el contenedor. De este modo, «se pretende conocer mejor los hábitos de separación, los errores más comunes y el nivel de implicación de la población con esta práctica», añaden desde STTZ. Se está trabajando también, en la puesta en marcha de una aplicación para Smartphone en la que, el usuario pueda recibir información sobre reciclaje y comunicar incidencias (contenedor averiado, solicitud nuevos contenedores, etcétera).
Rutas industrial y rural
Con respecto a la recogida en las zonas industriales, Servicios de Txingudi ha iniciado ya una acción, consistente en registrar la información del volumen de residuo que se recoge a cada abonado industrial para cada una de las fracciones de residuo. El objetivo es ajustar las rutas a las necesidades reales y hacerlas más eficaces.
Este año se ha implantado también, la recogida selectiva (envases, papel y vidrio) en zona rural. Existen ya 10 isletas completas en el total de las 50 instaladas.
