El portavoz de EAJ-PNV en el Ayuntamiento de Irun, Xabier Iridoy, pidió ayer a la Diputación Foral de Gipuzkoa que explique a qué se debe el retraso en la puesta en marcha de los cambios previstos en la línea interurbana entre Irun y Hondarribia, la E-25. Iridoy recordó que el Pleno de la Corporación aprobó por unanimidad en marzo una moción de iniciativa jeltzale para instar al ente foral a reconsiderar el recorrido actual que transcurre por las avenidas de Gipuzkoa y Euskal Herria y tiene su cabecera irundarra en Larreaundi. El objetivo era que, sin dejar de pasar por éste último barrio, el autobús llegara al intercambiador de San Juan, «donde paran actualmente las tres líneas urbanas de Irun».

En el mes de junio, el Gobierno municipal anunció que existía ya un principio de acuerdo con el departamento foral de Movilidad y Transporte Público para ejecutar una modificación, «que entendemos que supondrá una clara mejora del servicio para los usuarios de la línea», apuntaba Iridoy. Según se informó entonces, se trataba de que tras llegar a Larreaundi por el recorrido actual, el autobús siguiera hasta la plaza Urdanibia y desde ésta subiera al intercambiador de San Juan por la cuesta San Marcial. «Desde que se aprobó la moción hemos seguido muy de cerca el asunto y viendo que tras aquel anuncio habían pasado dos meses y nada cambiaba, a principios de septiembre me puse en contacto con el director de Movilidad y Transporte Público de la Diputación», explicó ayer Iridoy.

Cuando preguntó sobre por qué los cambios no se habían puesto en marcha, el portavoz jeltzale recibió una respuesta poco concisa en la que se hacía referencia a que «podían tener afecciones sobre algunas frecuencias, sobre todo en verano, sin concretar, en cuáles ni a qué se debían». Sin embargo, «también me dijeron que, pasado el verano, el 1 de octubre, entrarían en vigor las modificaciones».

Ayer, 2 de octubre, la línea Irun-Hondarribia seguía como estaba. «Es incomprensible esta doble ineficacia. La Diputación no ha introducido los cambios previstos ni ha informado de cuándo puedan llegar a implantarse. Pero además tampoco dice por qué no lo hace ni qué motivos hay para que no esté hecho». El edil irundarra consideraba que hay motivos suficientes para estar «enfadado» con una actuación foral que en este tema calificaba de «lamentable».

Aprovechando su comparecencia sobre la línea interurbana, Iridoy dedicó unas palabras a los autobuses urbanos. «Desde que en mayo entraron en funcionamiento las nuevas líneas, se nos han trasladado resultados periódicos que, sobre todo algunos meses, han reflejado incrementos significativos de usuarios en las líneas 2 y 3. Hay que recordar que las nuevas líneas fueron resultado de un proceso de participación ciudadana a través de la Mesa de Movilidad. Y porque no debemos conformarnos y debemos seguir mejorando, en unos meses habría que convocar de nuevo esta Mesa y ver qué mejoras caben».