El Comedor y Punto de Encuentro Social se refuerza y estará abierto a diario

Bajo el nuevo nombre de Servicio de atención diurna para la inclusión, el Comedor y Punto de Encuentro Social, ubicado en las instalaciones del antiguo hospital, se ha visto reforzado desde el pasado 1 de noviembre. Este recurso municipal está ya operativo toda la semana, en horario de 10.00 a 19.00, los días laborables y de 13.00 a 17.00, los sábados, domingos y festivos, manteniendo los mismos servicios.

El delegado de Bienestar Social, Sergio Corchón, informó ayer sobre las novedades del comedor social y punto de encuentro y anunció el nuevo contrato con Emaús Fundación Social para la gestión de este recurso. «Dentro del trabajo en la atención a las personas en situación de riesgo o exclusión social que realiza el Ayuntamiento de Irun, los servicios de comedor y de punto de encuentro son fundamentales para cubrir las necesidades básicas de alimentación e higiene de estas personas», dijo el delegado, sin olvidar «la promoción de procesos individuales de mejora que favorezcan la inclusión social».

Abierta en julio de 2010, la instalación, pionera en Gipuzkoa, alberga, además del comedor social, servicios de ducha, higiene personal y lavandería, así como un espacio de acompañamiento. En este espacio de relación social, se puede descansar, leer, tomar un café, utilizar el ordenador o realizar actividades lúdicas. Además, las personas que lo utilizan disponen, si lo necesitan, de orientación y asesoramiento individual.

El Comedor Social y Punto de Encuentro empezó abriendo sus puertas por la mañana para, tras los cambios introducidos a comienzos de 2015, prestar servicio también por la tarde. Con el nuevo contrato anunciado ayer por el delegado de Bienestar Social, la instalación pasa del horario partido a ofrecer un servicio continuo y prestar atención por la tarde los fines de semana y días festivos.

El acceso al recurso de comedor social se realiza a través del departamento de Bienestar Social. Los requisitos exigidos son ser mayor de edad, estar empadronado o establecido en Irun, no percibir ingresos por importe equiparable al de la RGI y estar en riesgo o situación de exclusión social. El punto de encuentro tiene los mismos criterios de acceso, aunque sin limitación por ingresos económicos, no siendo necesaria la derivación a través del departamento de Bienestar Social.

Sergio Corchón destacaba, por otra parte, el crecimiento que ha registrado el comedor social en cuanto al número de plazas. El servicio nació con capacidad para 30 personas. En 2012, las plazas se ampliaron a 60 y en 2015, su capacidad se volvió a modificar, llegando hasta las 90, en casos de demanda.

Feli Goikoetxea, responsabe del servicio de Intervención Comunitaria del área de Bienestar Social, ofreció los datos de uso del ahora llamado Servicio de atención diurna para la inclusión en el primer semestre de 2018. Por lo que al comedor Social se refiere, del 1 de enero al 30 de junio de este año pasaron por la instalaciones 159 personas (83% hombres y 17% mujeres) y se dieron 9.084 menús. La media de ocupación durante ese semestre osciló entre las 62,4 personas al día del mes de febrero a las 43,7 del mes de junio.

El resto de servicios se engloban en el Punto de Encuentro Social, que en este mismo periodo de tiempo registró la entrada de 298 personas. En detalle, 118 utilizaron el servicio de ducha, 96 usaron la lavandería, 81 el servicio de higiene personal y 208 el espacio de acompañamiento.

En total, el Comedor y Punto de Encuentro Social ha sido utilizado en el primer semestre del año por 307 personas, de las cuales el 78% fueron hombres y el 22% mujeres y el 30% nacionales y el 70% extranjeros).

Sergio Corchón destacó, por otra parte, la labor socioeducativa que se realiza en el espacio de acompañamiento con aquellas personas que lo necesitan. «Son intervenciones para reducir posibles riesgos de salud, escuchas en momentos de crisis, gestiones para obtener recursos de las administraciones y mantenimiento de procesos de mejora, entre otras».

El delegado comunicó que con las mejoras de este centro, «habrá una trabajadora social más para atender a las personas que acudan a este recurso. Queremos que quienes residen en Irun, que por las razones que sean hoy en día no tengan cubiertas estas necesidades, tengan en la ciudad un punto de referencia en el que puedan comer, asearse, ducharse y contar con un espacio de acompañamiento, pieza clave en la lucha contra la exclusión».

Emaús Fundación Social gestionará, a partir de ahora, el nuevo Servicio de atención diurna para la inclusión. El director de la entidad, Javier Pradini, recordó la larga trayectoria de Emaús «acompañando a personas en situación de exclusión. Son 38 años en el territorio y desarrollando diferentes tipos de programas, servicios y gestión de centros. En este caso, es un reto para nosotros como entidad asumir esta responsabilidad, porque son nuevos servicios que se adaptan a las necesidades sociales que tiene el territorio. Sabemos que contamos con un equipo que ha venido trabajando hasta ahora con lo todo lo mejor que tenía y sabía. Vamos a enfocar nuestro trabajo hacia la calidad y la calidez con las personas atendidas para que suponga para ellas un paso adelante».