Noticia publicada en Diario Vasco,el sábado día 15 de Junio de 2019.

El Ayuntamiento de Irun va a destinar en concepto de ayuda humanitaria de emergencia 6.000 euros para ayudar a los damnificados por el ciclón 'Idai', en Mozambique.

El pasado 14 de marzo, el ciclón 'Idai' golpeó tres países de África sudoriental: Mozambique, Zimbawe y Malawi, dejando a su paso un balance de 847 víctimas mortales y más de tres millones de personas afectadas, miles de ellas obligadas a desplazarse. El paso del ciclón destruyó también todo tipo de infraestructuras: viviendas, escuelas, hospitales y vías de comunicación y arrasó a su vez miles de hectáreas de cultivo. La devastación que ha provocado el ciclón 'Idai' supone una de las peores catástrofes meteorológicas de la historia de África, como ha señalado Antonio Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, y Mozambique ha resultado el país más afectado.

Sólo allí, se han registrado ya 2.424 casos de cólera entre los 1,85 millones de personas afectadas por el temporal. Los principales ríos del país se desbordaron y provocaron la inundación de localidades enteras. Se estima que son unas 239.000 las viviendas dañadas o destruidas y los daños causados a los cultivos se extienden a unas 715.300 hectáreas.

En este contexto Unicef ha puesto en marcha un proyecto de ayuda humanitaria que tiene como objetivo prevenir enfermedades transmisibles por el agua entre una población de casi dos millones de personas. Para ello, trata de garantizar, para los seis primeros meses tras la emergencia, el acceso a agua segura y un saneamiento y una higiene adecuados entre la población damnificada por el ciclón.

Unicef instalará letrinas móviles y suministrará agua potable en tanques de 10.000 litros con tabletas de purificación, además de kits de agua e higiene para las familias. Con la aportación que el Ayuntamiento de Irun ha aprobado destinar al proyecto de emergencia de Unicef se financiará el suministro de dos tanques de 10.000 litros de agua y tabletas de purificación de agua correspondientes para una provisión de agua potable que asegure un mínimo de 22 litros diarios por persona para beber, lavar, cocinar y para higiene.