Noticia publicada en Diario Vasco,el lunes día 15 de Marzo de 2021.

La presión migratoria se rebaja en Irun tras reducir Francia los controles en la muga

Se espera que la cumbre que se celebra hoy entre Sánchez y Macron permita avanzar en la gestión de esta frontera común

Varios migrantes, en el paso fronterizo entre Irun y Francia. / FERNANDO DE LA HERA

PATRICIA RODRÍGUEZLunes, 15 marzo 2021, 06:23

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La presión migratoria en Irun se ha rebajado este fin de semana, pese a que se esperaba un aumento de llegadas derivadas de la crisis que se está viviendo en Canarias. Fuentes del Gobierno Vasco, que ha desplegado junto a los ayuntamientos, un dispositivo especial de atención,atribuyen esta evolución a un descenso de los controles en la muga por parte de la Policía francesa, lo que ha permitido que el paso hacia Francia haya podido completarse por parte de un mayor número de migrantes.

Así, durante la jornada del sábado un total de 38 personas pernoctaronen el dispositivo fijo de Hilanderas de Irun que gestiona Cruz Roja, 14 en el albergue de peregrinos del municipio y 8 en el albergue de Hondarribia, un total de 60 personas, 4 de ellas mujeres y sin menores acompañados. El número de comidas entregadas ayer fueron 69 y 73 cenas. Todas las personas que se acercaron a estos recursos «fueron atendidas y nadie se quedó sin atención».

El pasado fin de semana, la llegada inesperada de más de un centenar de migrantes a Irun obligó al Gobierno Vasco a activar un plan de contingencia e incrementar los recursos de acogida, ya que resultaron escasos los centros habituales que se destinan a que estos migrantes en tránsito puedan pernoctar. De hecho, se había llegado a habilitar el frontón de Hondarribia ante la previsión de un nuevo aluvión de llegadas este último fin de semana, que finalmente no ha ocurrido.

La crisis migratoria en Canarias ha tenido un impacto directo en la frontera de Irun, adonde han ido llegando toda esta semana inmigrantes en su ruta hacia otros países europeos pero que se encuentran con el 'muro' de la frontera con Francia. Los controles fronterizos por parte de la Gendarmeria gala se han intensificado a raíz del estado de máxima alerta por controles antiterroristas. El cierre de varios pasos en la muga impuesto por el Gobierno francés ha añadido un grado más de dificultad en el objetivo de los migrantes en situación irregular de continuar su travesía hacia el norte. Los que ven frustrado su intento y son devueltos se juntan con los que siguen llegando a Irun con la misma intención de cruzar la muga.

Sin embargo, se espera que la cumbre de hoy entre el presidente francés Emmanuel Macron y su homólogo Pedro Sánchez, en la ciudad de Montauban (sur de Francia), permita avanzar en la gestión de esta frontera común. De hecho, según fuentes del Gobierno Vasco, «desde el jueves pasado están pasando los migrantes hacia París, probablemente para evitar un conflicto en Irun» mientras se avanza en la negociación bilateral.

El asunto de los pasos fronterizos se discutirá hoy. Los dos mandatarios tendrán ocasión de abordar la necesidad de avanzar en el pacto europeo de migración y asilo o en la importancia de que haya un correcto funcionamiento del espacio Schengen, según fuentes del Eliseo citadas por Europa Press.

«Malestar»

En los últimos meses, Francia ha intensificado los controles para evitar la llegada de inmigrantes sin papeles, en su mayoría de origen subsahariano. Hasta 19 pequeños pasos fronterizos han sido cerrados de forma unilateral por las autoridades francesas, quienes justifican la medida en controlar mejor la circulación por la pandemia, la lucha antiterrorista y el control de la inmigración ilegal.

España ha manifestado a París su «malestar» en varias ocasiones por estas medidas. Entre los puntos que se debatirán está la creación de una comisión que estudie los efectos negativos de los cierres en la vida de las poblaciones transfronterizas de cara a posibles reaperturas.

Esta semana, en el Senado, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha subrayado la importancia de la cooperación con Francia mostrando su deseo de levantar los controles en algunos pasos fronterizos a finales de abril. El ministro respondía así a la senadora del PNV Almudena Otaola, que se quejó de la afectación que tiene para los trabajadores transfronterizos, estudiantes o la actividad de ocio este cierre de pasos fronterizos.