Bertako gaia
En Irun, como en muchos otros municipios, proliferan las huertas de uso particular que algunos ciudadanos han plantado y cuidan en parcelas municipales en desuso. Las hay en ámbitos como San Miguel-Anaka y las había en Siutz o en Osinbiribil y en la calle Alberto Larzabal, donde distintas actuaciones y nuevos usos de los terrenos han obligado a su desmantelamiento, dejando a los usuarios sin otras alternativas.
Muchas son las voces que han venido demandando al Ayuntamiento de Irun que ponga en marcha un proyecto de huertas de uso social, en un lugar debidamente acondicionado y sorteando entre las personas interesadas el uso y disfrute de las correspondientes parcelas, siempre para el autoconsumo.
En los presupuestos del pasado año, Irun habilitó una partida para redactar un proyecto de huertas ecológicas y sociales en una parcela municipal ubicada en Puiana, cerca del Poblado de Urdanibia y detrás de la línea de pabellones de la avenida de Letxunborro. Parcela en la que actualmente ya hay algunas huertas instaladas, por su cuenta, por varios particulares.Hace dos semanas, el Partido Popular puso sobre la mesa el debate sobre este proyecto, cuyo coste asciende a 1,15 millones de euros para 100 parcelas de huerta, animando al gobierno socialista "a ajustar el proyecto en lo posible y ejecutarlo, aunque sea en varias partes".
Argumentó entonces la portavoz popular, Juana de Bengoechea, que el de Irun es "un proyecto más a la europea, con un diseño de parque de ocio que tiene, al mismo tiempo, integradas en su seno las huertas".
Este diseño y concepción más moderna, junto con la necesidad de descontaminar la parcela de Puiana, que tuvo en el pasado usos de carácter industrial, sería el motivo principal de su alto coste.
DESPROPORCIONADO Un coste que a juicio de Xabier Iridoy, portavoz del PNV en Irun, supone "en cifras redondas, un millón de euros para 100 parcelas, lo que arroja 10.000 euros por huerta, algo que se antoja totalmente desproporcionado".
"No se puede gastar un millón de euros en un proyecto de huertas que se dicen sociales, porque sería un contrasentido; lo social debe empezar por la propia esencia, el coste de su puesta en marcha", señala Iridoy.
"Irun ha desmantelado bastantes huertas en los últimos tiempos, y a buen seguro que habrá demanda a la hora de sortear esas parcelas de Puiana; además, hay que pensar en el uso social, por ejemplo, dando prioridad a las más de 5.000 personas que en Irun están sin trabajo, por lo que las huertas suponen para ellos", afirma Iridoy, y explica: "Por un lado como fuente de alimento, autoabasteciéndose de su propia producción, y por otro, por la mejora anímica y psicológica que puede suponer, en algunos casos, el poder dedicar su tiempo, siempre de forma voluntaria, a esta labor".
Tras las visitas que los ediles de Irun ha hecho estas últimas semanas a proyectos de huertas urbanas como los de Hernani, Tolosa, Donostia, Errenteria o Usurbil, Xabier Iridoy afirma que "no puede ser que allí donde otros gastan un promedio de 2.000 euros por parcela de huerta, en Irun el coste vayan a ser 10.000; habrá que pensar quizá en otras ubicaciones y en sacar, con un millón de euros o probablemente con mucho menos, cuantas más huertas mejor".
Iridoy pone como ejemplo Errenteria, donde "ha habido 300 solicitudes para 70 huertas". "Lo social en este proyecto empieza por construir cuantas más huertas mejor, porque la demanda será casi seguro muy alta, y hacerlo con un coste mucho más razonable, no como un parque con huertas a modo de escaparate", concluye el edil jeltzale.
Por su parte, el portavoz de Bildu, Oinatz Mitxelena, comparte lo expresado por Iridoy en cuanto al coste, "una barbaridad", y la rentabilidad social del proyecto, y afirma que "habría que ir incluso a un modelo de autogestión en grupo de las huertas, que serviría a los adjudicatarios para trabajar desde el arranque, de forma coordinada y con menores costes".
DETALLES
Visitas. Ya con el proyecto para Puiana redactado y con sus características y costes sobre la mesa, los ediles de Irun han visitado estas últimas semanas varias huertas urbanas en Gipuzkoa, como las de Hernani, Donostia, Tolosa, Usurbil, Errenteria o el Ekogune de Kutxa.
Costes. Los proyectos citados han supuesto un coste que ronda los 2.000 euros por cada huerta; el de Irun supondría 10.000.
LAS FRASES
El portavoz jeltzale se pregunta si "no sería mejor buscar otra ubicación y hacer, con el mismo dinero o menos, muchas más huertas y a un coste razonable".
El portavoz de Bildu cree además que "el carácter social se puede imprimir desde el principio, animando a los adjudicatarios a colaborar en su puesta en marcha"
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