Muchas calles han estrenado esta semana el sistema de aparcamiento regulado mediante pago, aunque, como ayer recordaba la delegada de Movilidad en funciones, Cristina Laborda, no será hasta la próxima cuando comiencen a imponerse sanciones. Se trata de una implantación progresiva, no sólo por la cuestión de las multas. El pago con tarjeta en las máquinas de las nuevas zonas OTA llegará en unos días. Otras ventajas y comodidades asociadas a los nuevos postes de pago tendrán que esperar a que el nuevo modelo de máquina se extienda al resto de la ciudad. Se estima que será para principios de julio.

Entre las novedades, la más llamativa es la que permitirá convertir la matrícula del vehículo en algo así como una tarjeta-monedero de OTA. Las nuevas máquinas exigen introducir el número de las placas del coche y, gracias a esa identificación, se abre esta posibilidad. Así, al retirar el vehículo, el usuario podrá 'notificárselo' al aparato, que no le devolverá monedas, «pero el dinero sobrante se acumulará asociado a la matrícula y estará disponible la siguiente vez que el usuario vaya a pagar OTA», explicó Laborda. De esta manera, también a pie de calle se conseguirá lo que ya permitía la aplicación de móvil estrenada el mes pasado: «pagar sólo por el tiempo estacionado, una de las mayores reivindicaciones de los usuarios de OTA».

Con la extensión de la nueva maquinaria de pago llegarán más cambios, como el que permitirá discriminar las sanciones en función de si no había ticket o si el usuario superó el tiempo por el que había pagado en más o menos minutos. Un lector incorporado al poste leerá el código de barras de la sanción para informar del coste correspondiente a la misma.

También autónomos y gremios que trabajan a domicilio verán sustituido su «obsoleto» sistema de condiciones especiales por otro, asociado a la apliación de móvil previo registro en el SAC, que les habilitará estacionamientos en OTA «sin un tiempo máximo y con unas tarifas algo más baratas».

Con el nuevo diseño de OTA, las 3.179 plazas actuales pasarán a 4.536, de las que hasta un 5% pueden destinarse de manera exclusiva a aparcamiento para residentes. «Para determinar en qué zonas habilitamos estas plazas, la idea es abrir el debate entre todos los grupos políticos y con las entidades y asociaciones de la ciudad en el marco de la Mesa de Movilidad», adelantó ayer la delegada de Movilidad en funciones.