2 mayo 201700:08
La Sociedad Irungo Atsegina cumple su 95º aniversario y para comenzar con las celebraciones, 131 ahijados de la sociedad acudieron a la comida popular de mayores. Este almuerzo, que se celebra cada año, surge del carácter benéfico de la sociedad. «Conviene recordar que hace 95 años en Irun, para prestar ayuda social, no existía más que el Hospital-Asilo, en el que se atendía a las personas mayores sin recursos y a los huérfanos», señalan desde la Irungo Atsegiña.
Como es sabido, en Irun, el día de San Marcos, las madrinas regalan a sus ahijados la tradicional opila y la Sociedad Irungo Atsegina se convirtió en la 'madrina' de los huérfanos del Hospital-Asilo. Por ese motivo, el propio Ayuntamiento de Irun nombró oficialmente a la sociedad 'madrina' del Hospital-Asilo.
Continuando con esta costumbre, la celebración del 95 aniversario de Irungo Atsegina comenzó el jueves 28, con la tradicional comida para las personas mayores que están en las residencias de Irun (Municipal Ama Xantalen, María Inmaculada de Mendibil, Caser, Cruz Roja, Centro de Día Artia y Centro de Servicios Bidasoa). 131 personas mayores que están en estas residencias se reunieron para comer, invitadas por Irungo Atsegina, en el local de la sociedad. Tanto su presidente, Luis Etxebeste, como miembros de la junta directiva y algunos socios, ejercieron como cocineros y camareros. Tanto la comida como las opilas salen íntegramente de los presupuestos de la sociedad.
Desde 1922, Irungo Atsegina obsequia a todas las personas que se encuentran en las residencias para mayores de Irun la tradicional opila. Así, el pasado día 25 de abril, festividad de San Marcos, se repartieron 500 opilas en todas las residencias de Irun.
Premio para Koldo Salinas
Asimismo, la Irungo Atsegiña entregó este sábado el premio 'Irungo Erraldoiak-Gigantes de Irun' al maestro chocolatero irundarra Koldo Salinas. «A lo largo de su trayectoria profesional, Koldo, mediante su magia con el chocolate, ha llevado el nombre de Irun por el mundo». El premio, que este año cumplió su tercera edición, fue entregado por el presidente Luis Etxebeste, antes de comenzar la comida de hermandad para celebrar el 95 aniversario.
Este premio nació para reconocer la labor de todas las personas o entidades «que contribuyen y colaboran para que Irun sea mejor», explican desde la Irungo Atsegiña. En su primera edición, el premio fue concedido al Real Unión, y el año pasado al periodista Jon Sistiaga.