4 febrero 201500:08
Los datos de Lanbide sobre la ocupación laboral en la ciudad han dejado malas noticias en este arranque de 2015. Irun ha aumentado su lista de demandantes de empleo en 250 personas entre el fin del año pasado y el 31 de enero de este recién estrenado ejercicio. La mala noticia es aún peor porque, rompiendo la línea que había logrado mantener desde hace muchos meses, la comparación interanual refleja una tendencia de empeoramiento. Los 5.233 desempleados de enero de 2014 han pasado a ser 2.262 un año después, 29 más, elevando la tasa de paro en la ciudad al 17,9%.
Los datos para el conjunto de la comarca son algo más suaves. El incremento del paro en Hondarribia se quedó en sólo 10 personas (para un total de 950 y una tasa del 11,7%) y su saldo interanual arrojó una leve mejoría, con 31 solicitantes menos que compensan los 29 más en Irun.
A pesar de las malas cifras en la comarca, no ha registrado ésta los peores datos en Gipuzkoa en este mes de enero. El incremento del desempleo fue mucho mayor en otras cuatro zonas (especialmente significativo en el Bajo Deba) y la comparación interanual dejá también peores números en Alto Urola, Donostialdea y, especialmente, Oarsoaldea.
Dificil acceso al mercado
En los datos por sectores se refleja, por un lado, que el incremento principal de desempleo entre diciembre y enero se produjo por personas provenientes del sector servicios, aunque el resto también aportó al crecimiento del paro. En la comparación interanual, sin embargo, industria y construcción redujeron la demanda y en servicios apenas creció. El origen de los nuevos desempleados se encuentra, en la gran mayoría de los casos, en el grupo de quienes no tenían experiencia laboral previa.
