IRUN- Los municipios de Irun y Hondarribia, agrupados en la Mancomunidad de Servicios de Txingudi, consiguieron en 2017 elevar su tasa de reciclaje en dos puntos, para alcanzar el 48,5%, cifra que deja a ambas ciudades “a las puertas del objetivo del 50%, establecido por la Unión Europea para el año 2020”.
Así lo destacaron el viernes José Antonio Santano y Txomin Sagarzazu, alcaldes de Irun y Hondarribia y presidente y vicepresidente, respectivamente, de la entidad que gestiona el agua y los residuos de ambos municipios, al dar cuenta, junto a Leire Zubitur, gerente de Servicios de Txingudi, del balance de la recogida de residuos en 2017.
Leire Zubitur destacó que el pasado fue el año en el que se instauró el sistema de control de uso efectivo del contenedor marrón, mediante una tarjeta magnética, que ha permitido “aplicar la tarifa más económica a quienes realmente reciclan la materia orgánica”, un factor que “ha favorecido una actitud activa de la ciudadanía y ha elevado las cifras de recogida de esta fracción”.
2.618 TONELADAS DE ORGÁNICOAsí, en 2017 se recogieron en Irun y Hondarribia “2.618 toneladas de restos orgánicos, nada menos que un 40% más que durante el año anterior”, explicó la gerente de Servicios de Txingudi, quien detalló que irundarras y hondarribiarras están enviando en estos momentos a compostaje “algo más del 10% del total de residuos” que generan.
La mancomunidad destaca que Irun y Hondarribia se sitúan así “muy cerca del objetivo europeo de reciclar el 50%, fijado para el año 2020”
Zubitur señaló que “comparado con el año 2016, cuando no se llegó al 8%, la cifra está bien”, pero matizó que “hay que tener en cuenta que la materia orgánica representa, aproximadamente, el 40% de nuestra bolsa de basura, por lo que todavía hay mucho margen de mejora”.
Además de la materia orgánica, otras fracciones de residuos (salvo pilas y aceite doméstico, con notables descensos, del 24,7% y del 26%) registraron en 2017 subidas respecto al año anterior, contribuyendo al aumento general en la tasa de reciclaje.
Así, la recogida de materia orgánica de poda y jardinería tuvo un incremento del 20,1%, el textil subió un 9,4%, los envases un 6,25% y los aparatos eléctrico-electrónicos tuvieron un incremento de un 7,5%.
Con todos estos datos, la tasa de reciclaje subió dos puntos en 2017, para situarse en el 48,5%. Se trata de “una tendencia de alzas de año en año” que sitúa a Txingudi cerca del objetivo de reciclar un 50%, marcado por la Unión Europea para el año 2020. Leire Zubitur y los alcaldes de Irun y Hondarribia se mostraron “confiados en llegar a esa cifra”, pero indicaron que aun así, ambas ciudades no pueden “acomodarse”, porque seguirán generando anualmente “decenas de toneladas de basura que, si no en toda, en buena parte, se puede reciclar”.
MÁQUINAS EXPENDEDORASPara contribuir a este fin, Servicios de Txingudi instaló a finales de diciembre tres máquinas expendedoras de bolsas compostables para la materia orgánica, en sus oficinas de atención al público de la calle Juncal de Irun, en las oficinas del SAC de Irun y en el polideportivo Hondartza de Hondarribia.
Según los datos facilitados este viernes, en el primer mes de funcionamiento, 50 personas al día han retirado bolsas en estas máquinas.
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