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Sábado, 09 de Noviembre de 2019 10:27

Noticia publicada en Diario Vasco ,el sábado día 9 de Noviembre de 2019.

Ficoba se sube a la bici eléctrica

Nuevas bicis. Ander Sarratea, gerente de Ficoba, y Juan Carlos Ausín, de Innventa Energía, con el prototipo de su motor eléctrico./F. DE LA HERA
Nuevas bicis. Ander Sarratea, gerente de Ficoba, y Juan Carlos Ausín, de Innventa Energía, con el prototipo de su motor eléctrico. / F. DE LA HERA

UTILIZARÁ EN SUS VEHÍCULOS UN NUEVO MODELO DE MOTOR ELÉCTRICO QUE HA DESARROLLADO LA EMPRESA IRUNESA INNVENTA ENERGÍA

IÑIGO MORONDOIRUN.Sábado, 9 noviembre 2019, 07:56
Ficoba ha abierto una nueva línea de colaboración con una empresa irundarra, Innventa Energía. En esta ingeniería comandada por Juan Carlos Ausín ha nacido un nuevo motor eléctrico para bicicletas. Para desarrollar completamente el producto y probarlo con usuarios reales, preparó un proyecto junto al ferial que recibió apoyo económico del programa Smart Mobility de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
«Nos gustó el planteamiento que nos hizo porque encaja muy bien con las temáticas que desarrollamos desde Ficoba», afirma el gerente, Ander Sarratea. «Vamos a implantar un sistema interno de préstamo de bicicletas eléctricas concebido como un servicio añadido para clientes y expositores, abierto también al personal propio».

Menos engranajes. El motor de Innventa Energía se relaciona con la rueda por flujos electromagnéticos, sin multiplicadora
reduce el mantenimiento, mejora la eficiencia y permite un control mayor.
Por Bluetooth
Una aplicación de móvil gestiona el controlador que acompaña al motor y permite regular varios parámetros, entre otros, la fuerza del impulso eléctrico.
Velocidad limitable y recuperación de energía
El motor puede frenar la bicicleta y limitar su velocidad. Guiado por GPS, evitaría que circule a más de 30 en la ciudad o a más de 20 en zonas como la plaza Urdanibia. Ningún esfuerzo pedaleador conseguiría que la bici rebase la velocidad límite pero esa energía no se perdería, sino que cargaría la batería.

Mediante una aplicación podrá desbloquearse una de las cuatro bicis de la estación «y utilizarla para acercarse al centro de Irun, ir a comer o dar un paseo hasta la playa, por ejemplo». En cuestión de días entrará en funcionamiento esta propuesta de «movilidad gratuita, sostenible, amable con el medio ambiente y cómoda para moverse por la comarca sin tocar el coche. Creemos que es un valor añadido más que ofrecer como ferial, otro valor diferencial de nuestra oferta». De momento «es un pequeño ensayo. A ver qué respuesta encontramos. No nos cerramos a ampliarlo en un futuro para que sea accesible también al público; sería un muy buen complemento para nuestro parking gratuito. Pero hay que ir poco a poco», avisa Sarratea.
En sus primeras semanas las bicicletas serán modelos comerciales, «reguladas con distintos niveles de impulso: verde, amarillo, rojo y negro, como el código de dificultad de las pistas de ski», apuntaba Ausín. Será a final de año cuando se incorporen los primeros motores del proyecto MyBik-e. «Será un gran campo de pruebas con usuarios reales», comenta el ingeniero.
Un concepto nuevo
De su relación con Ficoba no sólo ha nacido este proyecto del préstamos de bicis, «hemos querido llevarlo a lo nuestro, que son las ferias», apunta Sarratea. Así, Tras una primera gran experiencia en la feria GoMobility de hace un año («ya estoy apuntado para la próxima edición, que será en marzo», afirma Ausín), también estuvo en Bioterra. «Más de 200 personas probaron bicis eléctricas en el parking de Ficoba y aprendimos mucho de lo que nos decían. A los usuarios menos habituales de la bici, el impulso eléctrico les resultaba agresivo», recuerda el ingeniero irundarra.
Su proyecto MyBik-e lo tiene en cuenta y permite un control de la colaboración eléctrica regulable desde una aplicación móvil. Las bicicletas eléctricas, para ser consideradas tales, deben dejar de ofrecer asistencia eléctrica a partir de 25 km/h. «Nuestro sistema, por cómo está diseñado, va más allá. Puede limitar la velocidad, de manera que por mucho que pedalees, o si estás bajando una cuesta fuerte, no pasas del límite fijado. Esa energía no se desaprovecha, sino que se usa para cargar la batería». Con un sistema GPS se pueden fijar los máximos para entorno urbano (30 km/h), viales en zonas de prioridad peatonal (20 km/h) o puntos de convivencia con peatones (5 km/h) de forma automática. «Eso lo estamos desarrollando. Llegará».