Irun y Hendaia, por una frontera abierta y fluida Imprimir
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Viernes, 29 de Mayo de 2020 14:48

Noticia publicada en Diario Vasco,el viernes día 29 de Mayo de 2020.

 

Irun y Hendaia, por una frontera abierta y fluida

 

Irun y Hendaia, por una frontera abierta y fluida

 

Reclaman la apertura de la muga en Behobia para que el puente de Santiago deje de ser «un cuello de botella» que genera largas retenciones y «complica el día a día de miles personas»

 

Axel Guerra

 

AXEL GUERRAViernes, 29 mayo 2020, 12:21

José Antonio Santano | Alcalde de Irun«Urge abrir el paso de Behobia, pero son necesarias más medidas»

 

El alcalde de Irun, José Antonio Santano, posa delante del Ayuntamiento bidasotarra.

El alcalde de Irun, José Antonio Santano, posa delante del Ayuntamiento bidasotarra.

 

El regidor espera que la muga se «abra mucho antes» del 1 de julio para facilitar la movilidad no solo laboral, sino también social, de los que viven en torno al Bidasoa

San Sebastián. Su condición de ciudad fronteriza ha provocado que Irun viva una situación «compleja», desde que los gobiernos español y francés cerraron la muga el 12 de abril por la crisis del coronavirus. El alcalde irundarra, José Antonio Santano, aboga por la apertura del paso de Behobia para descongestionar la zona y recuperar la actividad.

- ¿Han mantenido algún contacto en este tiempo para que se abra?

- Hemos realizado varios movimientos. Hace diez días, el alcalde de Hendaia, Kotte Ecenarro, y yo enviamos una carta al delegado del Gobierno en Euskadi y al Prefecto de Pirineos Atlánticos. También le hice llegar otra nota al ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, en la que le detallaba la situación que se está produciendo. Por último, el alcalde de Hondarribia, Txomin Sagarzazu, Ecenarro y yo remitimos el pasado lunes una nueva misiva a los dos partes, la francesa y la española.

- ¿Qué es lo que reclaman?

- En la carta que mandé al ministro le explico la realidad que vivimos en la frontera todos los días desde que se inició la desescalada y se está incrementando la actividad económica, así como produciendo la reincorporación laboral y escolar.

- ¿Han propuesto alguna medida concreta para flexilbilizar la gestión fronteriza?

- El problema es que la movilidad está aumentando pero por un único punto, el del puente de Santiago, y con unas condiciones muy estrictas que le han convertido en un cuello de botella. Lo que queremos es ser positivistas. La decisión más urgente que hay que tomar es la de abrir el paso de Behobia, pero son necesarias más medidas. No cabe duda de que en el trasfondo está otra cuestión que hay que abordar y que es la de flexibilizar las condiciones de la movilidad. Prácticamente solo está ligada a las relaciones laborales -si una persona vive en un lado y trabaja en el otro- y creemos que eso tiene que ampliarse porque vivimos en un entorno urbano de 100.00 habitantes. Debe gestionarse en clave más social para recuperar las relaciones personales y familiares, que llevan tiempo cortadas por el cierre de la frontera. Lo que está en el trasfondo es la importante afluencia de ciudadanos franceses del entorno de Hendaia que vienen a hacer sus compras y una parte importante de su vida a este lado de la muga

- ¿Han recibido alguna respuesta a sus demandas?

- Hemos hablado con el delegado del Gobierno en Euskadi y el subdelegado en Gipuzkoa, pero no se puede decir que tengamos una respuesta oficial. Hay que esperar.

 

Urkullu solicita a Sánchez ampliar la movilidad transfronteriza entre Euskadi, Navarra y Nueva Aquitania

 

- El Gobierno ha fijado el 1 de julio como la fecha a partir de la cual se abrirán las fronteras para los turistas. ¿Confía en que la de Behobia se abra antes para descongestionar la situación, aunque sea de manera parcial?

- Si finalmente las fronteras se abren el 1 de julio para el turismo, esperamos y deseamos que la de Behobia se pueda abrir con antelación suficiente para facilitar la movilidad y la vida social, económica y humana de los que vivimos en el valle del Bidasoa. De hecho, esperamos que la apertura sea mucho antes.

- ¿Hasta que punto influye depender de las administraciones de dos países distintos?

- Nos hemos encontrado con una realidad que es que Europa se construye desde los Estados sin tener en cuenta espacios como el nuestro, que es ejemplo de convivencia urbana, social, económica, comercial. Si rompes esos espacios, les haces un daño grande, enorme. Quienes aquí residimos hacemos todo tipo de vida en cualquiera de las ciudades, no pensamos en clave de frontera o si estamos pasando a otro país. Al contrario, vivimos en el Bidasoa y en función del momento vamos a una playa u otra, a los comercios de Irun, a los pintxos de Hondarribia, al colegio de aquí o allí...

- ¿Cuál es el impacto económico del cierre fronterizo?

- Siendo sinceros, en estos momentos no tenemos una evaluación cuantitativa del efecto económico. En cualquier caso, si más o menos el 30% de la clientela de Irun es de origen francés, queda claro el impacto grande que ha supuesto el cierre de la frontera y, que en algunos casos, ha provocado el paro total en zonas como la de Behobia.

- Los comerciantes de Behobia dicen estar «al límite»

- Sería una pena que alguno tuviera que cerrar. Desde el Ayuntamiento hemos preparado un plan de choque que está funcionando bien. Ahora mismo, lo importante es trabajar para que, en la medida de lo posible, ese paso fronterizo se pueda abrir con la mayor rapidez para que recupere fluidez. El objetivo es que el comercio en general pueda resistir hasta el momento en el que lleguemos, ya no a la normalidad anterior porque va a ser más complicado, pero si a una con distancia social y una serie de prevenciones que permitan que todo el mundo pueda continuar con su actividad.

- ¿Cómo afrontan el verano? ¿Ayudará a mitigar la situación?

- Si se abren las fronteras y hay turistas, el verano no va a ser el de los últimos años, pero esperamos recuperar una cierta actividad, aunque con muchas limitaciones y medidas preventivas. Por lo menos, sería un punto de apoyo para que la actividad de nuestro entorno pueda reactivarse. La mayoría de la ciudadanía es responsable y tiene conciencia de lo que nos jugamos en materia de salud, pero eso debe tener un punto de equilibrio con mantener la vida social y la actividad económica.

Kotte Ecenarro | Alcalde de Hendaia«Es preciso que París y Madrid se impliquen más en una solución»

 

Kotte Ecenarro, en el exterior de la casa consistorial de Hendaia.

Kotte Ecenarro, en el exterior de la casa consistorial de Hendaia. / DE LA HERA

 

«Cada día 4.000 personas atraviesan la frontera entre Irun y Hendaia; 3.000 de ellas de norte a sur y el resto en dirección contraria», recuerda

El alcalde de Hendaia, Kotte Ecenarro, reclama que el cierre del paso fronterizo de Behobia se deje de tratar como si «solo fuera un problema entre los gobiernos de París y Madrid» y se atienda al resto de realidades afectadas.

- ¿Cómo ha afectado el coronavirus a Hendaia?

- Los datos los gestiona la Agencia Regional de Salud y no traslada a la sociedad tantos informes como lo hace Osakidetza. Veo que en Hegoalde cada día, ciudad por ciudad, provincia por provincia, hay informes actualizados, pero en nuestro caso no tenemos capacidad de saber cuántas personas han pasado la Covid-19. Al tener más o menos la misma población que Hondarribia -17.000 habitantes-, estimamos que seguramente habrá habido en torno a 15 casos, como mucho. Al Ayuntamiento solo ha venido una persona afectada a comunicarlo. Aunque hay poca información, pertenecemos a una región, la del suroeste de Francia, que está protegida y sabemos que a nivel regional ha tenido poco impacto.

- ¿Cuántos guipuzcoanos residen en Hendaia?

- Una tercera parte de la población de Hendaia es guipuzcoana. Sabemos que cada día unas 4.000 personas atraviesan la muga; 3.000 de ellas lo hacen de norte a sur. El resto, en dirección contraria.

- Quienes cruzan a diario la frontera se quejan del tiempo que invierten por los atascos que se forma. ¿Se puede flexibilizar la situación?

- La policía fronteriza hace lo que puede con las instrucciones que tiene. Es una problemática de movilidad transfronteriza y por eso los alcaldes de Irun, Hondarribia y Hendaia nos hemos puesto en contacto con los gobiernos de Francia y España. La frontera no se puede tratar como si solo fuera un problema entre los gobiernos de París y Madrid. Además del cierre del paso de Behobia, hay más realidades que atender. Por ejemplo, nos encontramos con familias divididas que no se ven desde hace meses porque una parte de sus integrantes viven a un lado de la muga y el resto al otro lado. Por otra parte, el sector de los autónomos está en una situación compleja para trabajar aquí porque un autónomo por definición no tiene contrato. Si las cosas no se arreglan, los autónomos no pueden seguir con los trabajos que iniciaron en su día en Iparralde. No les van a pagar. Además, hay otra cuestión a tener en cuenta.

- ¿Cuál?

- Parece que la frontera se va a abrir para los turistas en julio. Si es así, espero que se abra antes para los que vivimos en la zona. Somos gente que tenemos familia, amigos, vecinos, clientes, empresas. Debemos salir, convivir y vernos cotidianamente. ¿Cómo explicas que pueda desplazarme 100 kilómetros dentro de nuestro departamento pero no pueda ir al municipio con el que comparto tantas cosas, además de límites geográficos?

- ¿Le consta algún tipo de comunicación entre las administración francesa y la española? ¿Han contactado con el Gobierno Vasco?

- Sí, también se han hecho gestiones con el señor Urkullu para que el Gobierno Vasco esté al tanto de lo que ocurre. Lo que nos trasladan desde la parte francesa es que el Gobierno español ha endurecido los controles en la frontera y, por reciprocidad diplomática, Francia ha hecho lo mismo. Nosotros, lo que decimos es que en la mitad de todo esto estamos la gente del Bidasoa y Txingudi. Llevamos muchos años tejiendo relaciones de todo tipo, no solo turísticas, y pedimos que se facilite el paso a la gente de esta zona a través de todos los pasos de la frontera. Es preciso que los diplomáticos de Madrid y París pongan interés, que se impliquen más, en solucionar lo que ocurre aquí.

- ¿Cómo afecta que cada país lleve su plan de desescalada?

- Entendemos que las competencias son diferentes y que nos enfrentamos a un problema sanitario, pero en la mitad de todo esto estamos las personas. Se debe prestar atención a cuestiones como las playas. Si a un lado de la muga se dice que se puede poner la toalla en la arena para tomar el sol y nosotros no podemos hacerlo, la gente no lo entiende. Les parece algo ilógico. Los ciudadanos ven que nuestros amigos y vecinos de enfrente sí pueden estar en las terrazas, en las sociedades, que abren las cafeterías y y los hoteles, pero que aquí no es así y se preguntan por qué. Parece que seguiremos igual al menos hasta el 2 de junio.

- ¿Han evaluado el coste económico del cierre de la frontera?

- Sabemos que las empresas están perdiendo y sufriendo mucho, pero no tenemos datos concretos.

- Hendaia es una localidad con un componente turístico muy importante. ¿Cómo afrontan el verano?

- El turismo representa el 17% de la actividad económica de la ciudad. A los alcaldes de ciudades con playas nos preguntan qué vamos a hacer con ellas. Si estamos dispuestos a delimitarlas en parcelas de cuatro metros cuadrados y todos hemos dicho que no. Es una gestión que nos parece imposible y no queremos entrar en ese sistema. Hay muchas más cuestiones a tener en cuenta. ¿Cómo vas a recibir a 30.000 personas en la playa y decirles que no tienen aseos porque hay que limpiar las teclas de acceso cada vez que pasa una personas? Es imposible. En este contexto, hay que pedir responsabilidad y paciencia a la ciudadanía para que las cosas marchen bien y dentro de tres semanas no nos digan que hay que cerrar de nuevo. Es lo peor que nos podría pasar.