24 mayo 201600:12
Las penas se han acabado en el Bidasoa-Irun. Por un lado porque el ánimo del equipo debe estar por las nubes para afrontar el momento más importante de la temporada, por otro porque el último fin de semana de competición liguera le salió redondo a los bidasotarras.
Después de la derrota de Barcelona, el empate contra el Octavio o ver cómo el Atlético Valladolid ascendía en Irun, ha llegado el momento de poner la mejor de las sonrisas y demostrar que el Bidasoa es el equipo más guapo de los que quedan en la División de Honor Plata.
El cuadro entrenado por Fernando Bolea no falló en el único cometido que pasaba por sus manos, que era ganar en Zamora. Los irundarras cuajaron un buen encuentro y se llevaron los dos puntos.
El choque estuvo abierto hasta el descanso, 14-14, pero un 1-5 de parcial al inicio de la segunda parte rompió el marcador en favor de los amarillos, que se acabaron imponiendo sin problemas, 24-31. La buena defensa y el trabajo de los laterales, Cristian se fue a los siete goles y Muiña a los seis, fue vital. Además de la aportación de los extremos, Kauldi hizo cinco tantos y Crowley cuatro, y la vuelta a su mejor nivel de Azkue, que dirigió bien al equipo y acabó con cuatro tantos.
Con los puntos en el bolsillo tocó echar un vistazo al partido entre el Alarcos Ciudad Real y el Palma del Río. Los irundarras necesitaban el tropiezo de los cordobeses y esta circunstancia se dio. Parecía imposible que los andaluces pincharan en un encuentro en el que llegaron a ir ganando 13-18 en el minuto ocho de la segunda parte, pero los manchegos remontaron, y el Bidasoa cerró la fase regular del campeonato en segunda posición con 51 puntos.
Solo un caso en diez años
El segundo puesto permite al equipo de Irun organizar la final a cuatro por el ascenso, aunque el objetivo marcado desde el primer día fue el del ascenso directo. La sensación ha sido agridulce en las últimas jornadas del campeonato, pero hay que tener en cuenta que los 51 puntos sumados por el Bidasoa hubieran sido sinónimo de campeón liguero en casi cualquier temporada.
Y es que en los últimos diez años, solo el Alcobendas, en la 07/08, ha sumado más puntos que el Bidasoa. Ese mismo curso, 46 puntos hubieran sido suficientes para superar al segundo clasificado, que fue el Ciudad Encantada con 45.
A 51 puntos, como el Bidasoa, también han llegado el Barça B, en 2012, en el que el ascenso directo fue para el Palma del Río con 41, y el Octavio, en 2011, año en el que 45 puntos hubieran bastado para acabar por delante del Huesca. Por poner más ejemplos, el gran Teucro de la temporada pasada ganó la liga con 50 puntos y el Zamora subió sin tener que pasar por el play-off en el año 2014 con 39.
Las matemáticas no engañan y en los diez últimos años, la media de puntos necesarios para lograr el ascenso directo ha sido de 45. Esta temporada, los 51 del Bidasoa solo han servido para ser segundos, a seis de un Atlético Valladolid que ha impuesto un nuevo récord con 57.
La nota no puede ser mala, aunque el Bidasoa-Irun solo logrará el sobresaliente si consigue el ascenso dentro de quince días. La cita será en Artaleku, donde los irundarras se medirán el sábado 4, al Ciudad Real en la primera semifinal. Por el otro pase a la final pelearán el Palma del Río y el Zamora. La final será el domingo.
Esta semana el club dará a conocer el precio de los bonos para la final a cuatro, así como los horarios, aunque ya está confirmado que la final se disputará el domingo 5, a las 16.00 horas, y será retransmitida por Teledeporte. Irun y Artaleku tienen que ser una olla durante las dos próximas semanas. La Asobal pasa por Artaleku. Ha llegado el momento de la verdad.
Los jugadores del Bidasoa están felices por jugarse el ascenso ante su público.