"Julius es un personaje fuera de lo común, que escapa a los patrones comunes, de ahí su interés" Imprimir
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Jueves, 16 de Mayo de 2013 12:18

Noticia publicada en Diario Noticias de Gipuzkoa sección Bertan Bidasoa Txingudi, el jueves día 16 de Mayo de 2013.


JAVIER SAN MARTÍN 'SHAF' ARTISTA POLIFACÉTICO Y AUTOR DE LA EXPOSICIÓN Y DOCUMENTAL SOBRE ROBERT JULIUS TORÍO

"Julius es un personaje fuera de lo

común, que escapa a los patrones

comunes, de ahí su interés"

Javier San Martín 'Shaf' es un irunés de 36 años que aunque estudió Publicidad, se define como "un artista multidisciplinar". Hoy presenta, a las 20.00 horas en el centro cultural Amaia, con entrada libre, su documental dedicado a Robert Julius Torío, un peculiar y popular personaje irunés
XABIER SAGARZAZU - Jueves, 16 de Mayo de 2013 - Actualizado a las 05:24h
Javier San Martín, en el exterior de su taller con una escultura dedicada a Robert Julius Torío, protagonista de su documental y exposición.
Javier San Martín, en el exterior de su taller con una escultura dedicada a Robert Julius Torío, protagonista de su documental y exposición. (X. S.)

IRUN.
Javier San Martín no ocultaba ayer su excitación ante el estreno de su documental esta tarde. Una película de 60 minutos de duración dedicada a ese personaje al que todos conocen en Irun como Julius, siempre vestido de militar y que se pasea incansablemente por toda la ciudad, con su mochila a la espalda, bastón y sus botas de monte. Un personaje "peculiar y fuera de lo común", según cuenta Shaf.
Los iruneses conocen perfectamente a Robert Julius Torío, al menos de vista, claro está. ¿Cómo se lo presentaría a quien no es de Irun y no está acostumbrado a verle?
Es difícil, incluso fuera de Irun, que algunos no conozcan a Julius. Es un hombre de 75 años que viste siempre de militar y va con su mochila, su bastón y sus botas de monte, recogiendo objetos de metal y viviendo de su venta. Pero es a la vez un gran desconocido, incluso para los irundarras. Hay muchos bulos sobre él y sobre su vida.
¿Cómo conoció a Julius Torío y por qué surge la idea de rodar un documental sobre él?
Como muchos en Irun, tengo recuerdos de Julius desde que era un niño. Mi padre le conocía y ya por entonces tuve algún contacto con él; era un personaje de los que llaman la atención de cualquier niño. Años después, haciendo un programa para Localia Txingudi, tuve la oportunidad de entrevistarle y emitimos pequeñas piezas de dos minutos. Ya más tarde, al tener que vaciar una de las plantas de mi actual estudio, ya que su anterior inquilino había dejado aquello lleno de trastos, hablé con Julius para que viniera y se llevara todos los objetos de metal que le pudieran interesar. Ese día, empezó a contarme una historia de cuando una vez le apuñalaron en Central Park, en Nueva York. Le pedí permiso para grabarle. Empezamos a tener sintonía personal y le fui grabando en distintas circunstancias, en escenas costumbristas de su vida actual. Más tarde, hice una cronología de todas esas grabaciones y le di forma de guion, y fue ahí cuando surgió la idea de montarlo todo en forma de documental, ya más en serio.
¿Usted que lo conoce mucho más a fondo que la gente que lo ve en la calle, cómo definiría a Julius?
"Me gustaría hacer una segunda parte del documental, viajando con Julius a Nueva York, si puedo convencerle"
Robert Julius Torío es, ante todo, una persona especial, un ser humano con un enfoque muy básico de la vida, que emana desde lo impulsivo y casi irracional; es alguien cuya filosofía y modo de ver el mundo tiene muy poco en común con la nuestra. De ahí su interés. Además, tiene una historia vital muy curiosa y apasionante. Su madre, de la que heredó la casa en la que vive en el barrio de Larreaundi, era de Irun, pero él se crió y pasó su juventud en Nueva York, cuando aquí todavía se vivía en plena posguerra. Eso marcó el tipo de persona que es.
¿Quienes no puedan ir hoy a ver el documental, dónde y cómo pueden verlo o hacerse con él?
En realidad, el documental es parte de un proyecto, la exposición que inauguraré la próxima semana en el museo Oiasso y que podrá verse hasta casi finales de julio. Todo gira en torno a la figura de Julius, con esculturas, pinturas, fotografías, alguna instalación y en formato audiovisual, este mismo documental, que podrá verse en la exposición de forma ininterrumpida. Además, el documental estará a la venta, al precio de cinco euros, en Pagalday Óptico, Loreak Mendian, Pastelería Aguirre y el propio museo Oiasso.
En su web (www.shaf.es), se pueden ver varios adelantos sobre el documental y su rodaje. Se habla de ir a conocer la otra parte de la vida de Robert Julius Torío, en Nueva York. ¿Han podido ir a rodar allí?
La verdad es que al final no, sobre todo por falta de recursos económicos para el viaje y la estancia. Julius habla mucho de su vida allí, de cómo trabajó de mensajero en Park Avenue, del incidente en Central Park que marcó su vida y le hizo acabar volviendo a Irun... No ha podido ser esta vez, pero el documental deja una puerta abierta para esa segunda parte, la de ir a Nueva York con Julius, recorrer la ciudad y rememorar sus vivencias de infancia y juventud. Me gustaría hacerlo, pero también tendría que convencerle a él para hacerlo, y no sería fácil.
¿En qué otros proyectos trabaja usted en estos momentos?
La exposición y el documental sobre Julius me han ocupado buena parte de mi tiempo en los últimos tres años. Desde hace semanas estoy muy centrado en ese proyecto. Cuando termine, me gustaría escribir el guion para una película basada en el personaje de Donnavón, que interpreté el año pasado en el reality Cracks del surf, del canal Nitro. Al productor le gustó Donnavón y me propuso la idea. Eso sí, no me veo actuando. Eso se lo dejaría a un actor profesional.

LAS CLAVES

· Su txoko guipuzcoano favorito: Soy surfero y me encanta ir a la playa de Zarautz. Suele haber buenas olas y no demasiada gente.
· Un monte: Jaizkibel es un lugar muy especial para mí. Me encantan sus acantilados en forma de queso gruyère. He tenido experiencias muy curiosas allí.
· Un paisaje: Las vistas desde el Punto G, la zona donde está la escultura de Sancho III El Mayor, cerca del faro de Hondarribia.
· Una playa: Para hacer surf no hay muchas como la de Zarautz. Si no es para coger olas, me quedaría con La Concha de Donostia. Me gusta lo bien integrada que está en la ciudad, es muy bonita y además, de arena muy fina.
· Una fiesta: ¡Ninguna es mejor que las que monto en mi casa
!

 

Última actualización el Jueves, 30 de Mayo de 2013 11:48