La ausencia de los grupos municipales Euskal Herria Bildu y Sí se Puede Irun marcó el desarrollo del Pleno ordinario de la corporación del miércoles. Los concejales de ambas formaciones ofrecieron una rueda de prensa previa para anunciar que se ausentan «indefinidamente» de las sesiones plenarias mientras no se resuelva el acceso telemático de los grupos de la oposición a los expedientes municipales «en las mismas condiciones que el equipo de Gobierno» y que pidieron «hace ya cuatro meses».

Aunque con ocho concejales menos, el pleno se desarrollo con normalidad. Se aprobó por unanimidad (de Socialistas de Irun, EAJ-PNV y Grupo Popular) el gasto plurianual para la construcción del ascensor a Artaleku e, igualmente, la modificación de planeamiento que habilita la construcción de una gasolinera en Zaisa II. Con la abstención del PP, el Gobierno sacó adelante también los precios públicos del bus urbano: 1,40 euros para el billete ocasional (con descuento por el uso de la tarjeta Mugi) y 1,50 para el nocturno.

En el turno de ruegos y preguntas la portavoz popular, Juana de Bengoechea, expresó los motivos por los que otros grupos se habían ausentado. «Nos han invitado a sumarnos, pero, aunque compartimos el fondo, ése no es nuestro estilo», señaló.

Reclamó poder ver expedientes de Bienestar Social y la presencia de todos los grupos en Servicios de Txingudi, pero sobre todo, criticó que «se está dificultando el trabajo de la oposición». Pidió «acceso telemático a los expedientes después de que pasen por la comisión informativa, antes de que vengan al pleno. Hace cuatro meses, el alcalde dijo que estaría en 15 días. Sentimos que nos toman el pelo». El delegado de Sociedad de la Información, Pedro Alegre, advirtió que «eso no es lo que nos pidieron Bildu y SPI. Lo que dice la portavoz del PP es más fácil de hacer», concedió.

«Grave e injustificable»

Ayer, el alcalde, José Antonio Santano, se mostró duro calificando de «inusual y un poco triste», «grave», «poco presentable», «injustificable» e «irresponsable» la ausencia de Bildu y SPI. «Además, ya que hablamos de transparencia y comunicación, hubiese sido razonable que al presidente del Pleno se le hubiese informado de las razones», cosa que, afirma, no ocurrió. Aunque Bengoechea dio algunas explicaciones durante la sesión, «lo que dijo poco tiene que ver con lo que en su día planteó Bildu-SPI», por lo que no valora posibles medidas para encauzar la situación «hasta que ellos nos digan qué es lo que ocurre exactamente». Citó «unas doce Juntas de Portavoces estos meses en las que nadie ha sacado este tema. Luego Bildu-SPI sale todos los días con algún pero en transparencia, así que creo que necesitamos un acuerdo que defina cuál es la transparencia que nos parece a todos suficiente y allá donde se tenga que ir, tendremos que llegar. Pero que lo digan». Recordó que «los medios humanos y materiales para la oposición son ahora más que nunca, la comunicación es abierta y fluida, la relación personal es buena y nuestra actitud no ha variado», por lo que atribuyó lo ocurrido a «un cambio de estrategia de Bildu al que se ha sumado SPI. Pero es una estrategia que tiene poco que ver con la gestión».

El 23 de diciembre la coalición PSE-PNV someterá ante el Pleno su programa de Gobierno. El día 28, quizá el 29, tendrá lugar la sesión presupuestaria. «Me daría pena que no acudieran. Me parece imprescindible que los concejales vayan al Pleno, es su responsabilidad, para lo que les han votado». En cualquier caso, se mostró «abierto a sus propuestas para el presupuesto municipal, porque hay margen para incorporar cosas».