Más de 100 migrantes esperan en Irún poder cruzar a Francia

Más de 100 migrantes esperan en Irún una oportunidad para poder cruzar a Francia. La llegada de migrantes los últimos fines de semana a la localidad fronteriza se ha incrementado de forma paulatina, pero este se han superado todas las expectativas. El Gobierno vasco y la Cruz Roja atendieron la noche del viernes a cerca de un centenar de personas y este sábado, a 106.

La mayoría son hombres, pero también hay mujeres y menores de edad, entre ellos dos bebés. Todos tienen un perfil parecido, proceden de países subsaharianos o del Magreb, y habrían llegado a la península a lo largo del mes de febrero procedentes de Canarias para recalar finalmente en Irún con el objetivo de intentar cruzar a algún otro país europeo, según el Gobierno vasco.

Un periplo que el último año se ha complicado aún más por el cierre de las fronteras para frenar la pandemia de la Covid, motivo por el que la policía francesa ha multiplicado los controles. Habitualmente, cruzar de un país a otro en algunos puntos de Irún no supone más que recorrer 100 metros, los que mide el puente de Santiago, por ejemplo, y no se tarda más de dos minutos andando.

Ante la llegada de más personas, el Ejecutivo vasco ha habilitado este fin de semana tres recursos extra. Así, al albergue en el que habitualmente se atiende a los migrantes en Irún, y con capacidad para unas 60 personas, se suma otro espacio en esta misma localidad, otro en Hondarribia y el Instituto Bidebieta de San Sebastián. Entre los cuatro se han habilitado un total de 150 plazas.

Además, el Gobierno vasco ha decidido de momento mantener todos estos recursos abiertos a la espera de cómo evoluciona la situación las próximas horas y días. Los migrantes que pasan por estos espacios reciben agua y comida, así como un kit con ropa básica, mascarillas y productos de aseo.