12 febrero 201606:51
La parada de autobuses de la plaza de San Juan, en el encuentro de la calle Fermín Calbetón con el paseo de Colón y la avenida de Navarra, se ha convertido en el principal nudo del transporte público en Irun. En ella llegan a coincidir las tres líneas municipales diurnas y la nocturna; la interurbana E-25 Hondarribia-Irun, su equivalente nocturna E-78 y la línea transfronteriza de fin de semana que pasa por la ciudad en su recorrido de Baiona a Hendaia. «Y está llamada a ser el punto de referencia de otra línea que, en el futuro, permitirá unir San Juan de Luz, Hendaia e Irun», avanzaba el alcalde, José Antonio Santano.
Con el actual trasiego de autobuses y viajeros «la parada se ha quedado pequeña para los autobuses y es incómoda para los usuarios», admitía Santano, que recordó que por esa razón, «la Junta de Gobierno licitó hace ya unos meses la construcción de una nueva parada». El concurso se ha resuelto y la obra ha sido adjudicada esta semana a la empresa irundarra Urbycolan por 353.606 euros con un plazo de 14 semanas a partir del comienzo de los trabajos. Éstos consisten en la ampliación de la zona para los autobuses y en la construcción de una marquesina de gran tamaño, «la mayor que habrá en la ciudad», que en su diseño tendrá «un guiño a la antigua visera, que estaba enfrente», indicó Santano. El proyecto incluye también la reurbanización de esa zona de encuentro de Fermín Calbetón, avenida de Navarra y paseo de Colón que estaba pendiente tras las actuaciones en esas tres calles. «También queremos mejorar ese cuello de botella que se forma al cruzar la calle Francisco de Gainza. Vienes por las aceras anchas del paseo de Colón y pasas a una muy estrecha. Hay que respetar el carril de circulación, pero hemos visto que algunos centímetros sí se pueden añadir para que el paso de los peatones sea más cómodo».
Pese a que el tamaño de la zona de obra es considerable, «se trata fundamentalmente de actuación en superficie, por lo que esperamos que para el final de la primavera esté todo terminado»
La futura marquesina tendrá un diseño que evocará el edificio de la visera que se encontraba enfrente
Las AES, en marcha
Santano dio cuenta también de otro acuerdo del Gobierno municipal para autorizar un gasto inicial de 557.591 euros para la concesión de las Ayudas de Emergencia Social. Se trata de una competencia del Gobierno Vasco que gestiona el Ayuntamiento y «aunque desde Vitoria no se han aprobado ni los criterios ni la cuantía para este año, queremos ser rápidos para no dejar sin respuesta a cualquier ciudadano que las necesite». El alcalde valoró que estas ayudas «responden a los problemas verdaderamente importantes que hay en una ciudad. Por eso, aunque siempre tenemos nuestras dificultades con el Gobierno Vasco para que asuma pagar lo que les corresponde, desde el Ayuntamiento no se va a negar la ayuda a quien realmente la necesite». Se refería con esto a que la partida anual que aprueba el Ejecutivo autonómico para las AES en cada municipio «es siempre insuficiente y somos los Ayuntamientos quienes, con nuestros recursos, respondemos a las necesidades de los ciudadanos». La diferencia se reclama después, «y en ocasiones se compensa, pero otras veces, como el año pasado, el Gobierno Vasco hace una aportación con la que no llega a cubrir el 100% del gasto».
Para 2016, sin saber aún si habrá alguna modificación en los criterios, se seguirán las pautas del pasado año «y si luego el Gobierno Vasco introduce modificaciones, ya las incorporaremos», anunció Santano.