Noticia publicada en Diario Vasco, el viernes día 21 de Julio de 2021.

El espacio social Korapilatuz ha denunciado «las dificultades que se ponen» para que voluntarios de distintas asociaciones acudan como acompañantes a citas con servicios sociales.

Para el colectivo, la alusión a la Ley Orgánica de Protección de Datos para justificar este requerimiento «no es de recibo. Nadie pensaría que una persona no pueda ir a acompañada a una consulta médica; entonces, ¿por qué para asistir a una cita con la trabajadora social hay tantos problemas?», preguntan. «Hemos tenido menos problemas en una sucursal bancaria cuando hemos ido a hablar de dar una solución a un desahucio que en una cita en servicios sociales».

Korapilatuz critica que se ponga «como excusa» la LOPD sin que se ofrezca «una solución, como por ejemplo, pedir el consentimiento expreso y por escrito que especifica la ley», si bien dicho reglamento lo reclama «respecto a los datos relativos a la ideología, afiliación sindical, religión y creencias, y no en estos casos». El colectivo considera que este argumento «no es más que una evasiva que formulan para que determinadas personas voluntarias no acompañen a personas en diferentes situaciones de vulnerabilidad». Impedir que acudan acompañadas, señalan, «no perjudica a las personas que acompañamos, sino a las personas a las que se les debería dar una solución a su situación».

El colectivo insiste en que todo el mundo «debería tener derecho a ir acompañado, pero más si son personas con una salud delicada, personas mayores o que no entienden bien el idioma. El acompañamiento da más seguridad a la persona».

Otra situación que impide ese acompañamiento son las consultas telefónicas, que «deben ser desaconsejadas por las dificultades que entrañan para mantener una comunicación fluida. Estamos en una situación en la que no es comprensible, ni por las medidas Covid, el que no se puedan realizar las citas presencialmente». Denuncian, además, «que se utilicen subterfugios como adelantar las consultas telefónicas para impedir que pueda estar presente una persona» acompañando.

Otra demanda que Korapilatuz ha puesto sobre la mesa es que «la información se dé por escrito»; por ejemplo, «los datos de la próxima cita o las soluciones propuestas que se van a llevar a cabo por parte de la trabajadora social». Esta petición es «una reivindicación histórica» de las entidades que componen Korapilatuz. «Es difícil compaginar esa forma sistemática de actuar, sin dar nada por escrito, con la política de transparencia que se dice llevar a cabo desde el Ayuntamiento».

El colectivo concluye solicitando «que se lleve a cabo una política de buenas prácticas y buen trato» hacia las personas «que se ven obligadas a acercarse a los servicios sociales».

Noticia publicada en Diario Vasco,el viernes día 23 de Julio de 2021.

Desarticulado un grupo criminal que vendía droga en la comarca del Bidasoa

La Policial Nacional detuvo la semana pasada a cinco personas en Irun y Hondarribia e incautó 233.000 euros y más de 2 kilos de cocaína

Agentes de la Brigada Local de Policía Judicial de Irun han desarticulado un grupo organizado que se dedicaba a la venta de droga en la comarca del Bidasoa. Los cinco integrantes fueron detenidos la semana pasada en Irun y Hondarribia y tres de ellos se encuentran ingresados en prisión. A todos ellos se que les imputan presuntos delitos de tráfico de drogas y de pertenencia a grupo criminal. Durante la detención, las fuerzas policiales incautaron cerca de 233.000 euros en efectivo y más de 2 kilos de cocaína. Esta incautación se suma a la conocida ayer, en la que la Guardia Civil detuvo a cuatro personas en Gipuzkoa y dos en Bizkaia en una operación contra el narcotráfico en la que se han incautado más de dos millones y medio de euros en droga, fundamentalmente de speed.

Según detalla una nota de prensa facilitada por la Dirección General de la Policía, la investigación comenzó el pasado año cuando agentes interceptaron a varios compradores, de nacionalidad francesa, que acudían hasta Irun, Hondarribia y Hendaia para adquirir sustancias estupefacientes. El grupo estaba dirigido por un ciudadano de nacionalidad marroquí que residía en Irun desde hacía varios años y que contaba con antecedentes previos por delitos similares. La banda estaba formada por otros cuatro integrantes que se ocupaban de las «labores de captación y aproximación de clientes a la droga y vigilancias y contravigilancias para detectar seguimientos de la policía». En el comunicado se subraya la colaboración de la Policía Local de Irún en la localización de dos integrantes del grupo que se encontraban huidos.

La desarticulación del grupo criminal se llevó a cabo el pasado 13 de julio y se saldó con la detención de los cinco investigados y el hallazgo e incautación, en varios registros domiciliarios y vehículos, de 2,1 kg. de cocaína, 1 kg. de hachís, 232.893 euros, una pistola de aire comprimido, además de sustancias para el corte de la droga y útiles y efectos para la manipulación de la misma.