La primera alegación propone reajustar la ocupación en planta de dos de las parcelas definidas en el proyecto Vía Irun, así como el reajuste de la calificación urbanística y de las condiciones de edificabilidad de la parcela que el PNV considera adecuada para la construcción del gran ambulatorio del centro. Esta alegación pretende asimismo permitir que en la modificación del Plan General de 2015 se pueda actuar por fases, es decir, sobre parcelas determinadas, y poder ceder así a Osakidetza el terreno para que pueda levantar el nuevo centro de salud, algo que de esta manera podría hacerse en “cuatro años”.

Por último, mediante esta primera propuesta se solicita que la modificación del Plan General recoja el cubrimiento del espacio ferroviario, desde la nueva estación hasta el paseo Colón, como se planteaba en el Plan inicial de 2015. “El objetivo es que se pueda hacer un parque central que integre definitivamente ambos márgenes de las vías férreas, como se está haciendo en Donostia, donde no solo se está construyendo la nueva estación, sino que además están haciendo una cubierta de 5.700 metros cuadrados, junto a Tabakalera, que pretende ser una nueva zona verde”, explicó Iridoy.

Mediante la segunda alegación el PNV solicita disponer de conexiones francas entre ambas márgenes del ferrocarril, independientemente de la estrategia en materia de movilidad que se adopte en cada momento. “Tenemos un único hilo que comunica los dos lados de la ciudad en el centro, por lo que necesitamos un segundo puente, pero en el planeamiento ni siquiera se ha trazado el espacio para la reserva de un futuro puente”, explica Iridoy, para remarcar que se trata de un objetivo “al alcance de Irun al que no se puede renunciar”.Para Iridoy, renunciara un segundo puente spobre las vías constituiría “un error histórico”.

Por último, la tercera alegación recoge que el pasado 7 de marzo la Comisión de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana del Congreso de los Diputados aprobó la Proposición no de Ley sobre una solución integral a la trama ferroviaria de Irun, presentada por el grupo parlamentario del PNV en el Congreso y publicada en el Boletín Oficial del Congreso de los Diputados. Mediante la misma, el Congreso insta al Gobierno español a impulsar las actuaciones conducentes a la ejecución del proyecto de cubrimiento de la playa de vías con la conexión viaria entre ambos lados de la ciudad, según la propuesta presentada al Plan General de Ordenación Urbana referido al proyecto Vía Irun 2030. “Esperamos que el Ayuntamiento no ponga impedimentos a algo que se está pidiendo desde el propio Congreso”, ha zanjado el portavoz del grupo

Cabe recordar que tras la apertura de la primera fase, entre Oñaurre y las calles Berio y Miguel de Ambulodi, desde el Consistorio se quiere dar continuidad al trazado y extenderlo hacia el este de la ciudad. “Siempre hemos defendido que para que la Ronda Sur tuviera el efecto deseado debía llegar a los barrios de Artia y Behobia”, explicó Páez. Al mismo tiempo, relató que en el Pleno de abril se aprobó una modificación de créditos con la que se habilitó un presupuesto de 18.200 euros para encargar la modificación del Plan General, un paso previo “necesario para seguir con la tramitación que, en paralelo, se completa con el encargo de la redacción del proyecto abierto desde el departamento municipal de Obras”.

El delegado de Urbanismo declaró asimismo que para poder seguir avanzando resulta indispensable ”la disponibilidad económica por parte de la Diputación, como ocurrió con la primera fase”, y aseguró haber solicitado para ello una segunda reunión con los responsables forales, si bien todavía no existe una fecha para su celebración.

En cuanto a la situación general del proyecto de la Ronda Sur, Páez manifestó que su objetivo es la mejora de los tráficos y los accesos a la ciudad.

“La nueva fase busca consolidar un itinerario que termine de conectar de forma más rápida y directa los barrios situados en la zona sur y este, como son Larreaundi, la Parte Vieja, Dunboa, Artia y Arbes, sin tener que utilizar el viario urbano”.

Además, Laborda recordó que el pasado mes de enero se redefinió el planteamiento para el trazado completo de este proyecto, pasando del plan inicial en el que la Ronda Sur discurriría por la parte trasera de las villas de Ribera, a que esta siguiera paralela a la autopista. “Además de implicar una menor complejidad constructiva y una adaptación ambiental más amable respecto a los planes anteriores, este proyecto reduciría el coste total de la operación de los 33 millones previstos en un principio a los 24,2”, contó.

La delegada explicó asimismo que ahora que “desde el departamento de Obras contamos con el crédito suficiente para hacer la modificación del Plan General, necesitamos hacerlo de la mano de la Diputación”.