22 septiembre 201601:03
Los locales de Irun Factory (c/José Antonio Loidi Bizkarrondo, 8, en Palmera-Montero) acogerán mañana viernes, a partir de las 19.30 horas, la presentación del programa Escuelitas de Economía Feminista, una iniciativa impulsada por la ONG Mundubat, que llega a Irun de la mano de Bidasoaldeko Elkarte Feminista (BAF).
El programa se ha llevado a cabo ya en Basauri y en Donostia y el próximo 8 de octubre comenzará en Irun. «Estamos contentas porque hemos conseguido que las Escuelitas vengan al Bidasoa», decía Maritxu San Pedro, presidenta de Bidasoaldeko Elkarte Feminista. «Para nosotras, es un regalo poder contar con esta experiencia. Las Escuelitas se nutren del recorrido que ha realizado la red de mujeres mesoamericanas en resistencia por una vida digna, con el apoyo de Mundubat, que es una ONG muy identificada con la igualdad. El trabajo de muchas mujeres de países como El Salvador, Costa Rica, Honduras, Panamá, Guatemala y Chiapas (México) «se traslada y adapta a la realidad de Euskal Herria».
La Escuelitas de Economía Feminista impartirán en Irun cinco módulos que abarcan diferentes contenidos históricos y prácticos. El curso se extenderá desde octubre hasta mayo, con una periodicidad quincenal, los sábados, en horario de 10.00 a 14.00. Se tratarán temas como 'La economía desde la vida cotidiana de las mujeres', 'El patriarcado', 'La división sexual del trabajo' o 'El neoliberalismo en la vida de las mujeres', entre otros.
El programa está dirigido «a todo tipo de mujeres, porque lo que nos enriquece es la diversidad. Tendremos dos formadoras, pero vamos a aprender todas de todas. Será un aprendizaje colectivo», añadía Maritxu San Pedro. Los módulos se impartirán en el local de Bidasoaldeko Elkarte Feminista, situado en la calle Fueros, 2-1º derecha. Hay aldrededor de 20 plazas disponibles. Quienes quieran apuntarse, pueden enviar un mail a
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o acudir mañana a Irun Factory.
El programa «tiene voluntad multiplicadora y de continuidad. Hay gente de Hondarribia, Oiartzun y Errenteria apuntada, de manera que las mujeres que se formen aquí, podrán trasladar sus experiencia a sus respectivas comarcaspara formar una red», concluía San Pedro.
