28 abril 201700:15
El alcalde, José Antonio Santano, informó ayer de que el Ayuntamiento va a pedir a Renfe que mejore la conexión entre Irun y Donostia mientras duren las obras del tercer hilo que se están realizando en las vías. Con motivo de éstas, Renfe anunció ciertas restricciones en su servicio de Cercanías que buscó compensar «con un acuerdo con Euskotren. Pero las huelgas intermentes en este otro servicio, especialmente en las horas punta, están creando dificultades a miles de personas que cada día viajan entre las dos ciudades».
Las obras van a durar aún más de un año. Además de trabajar en una solución con Renfe, Santano quiere colaborar también con Lurralde Bus, cuyos autobuses, registran afluencias que «empiezan a generar problemas al usuario». Dadas las restricciones ferroviarias a las que obligan las obras, el alcalde considera que las mejoras en el transporte a Donostia deben llegar reforzando el transporte por carretera. «Sé que no es fácil, pero es necesario».
Minuto de silencio por Gernika
Santano dio cuenta de esto en su comparecencia sobre el pleno celebrado la víspera en el Ayuntamiento. La sesión comenzó con un minuto de silencio con el que los corporativos locales conmemoraron el 80 aniversario del bombardeo de Gernika, que se cumplía precisamente el miércoles. Posteriormente, el Gobierno local dio cuenta a la corporación de los remanentes del pasado ejercicio y del estado de ejecución del presupuesto actual y se aprobó una moción de EH Bildu para impulsar la visibilidad de las «diferentes realidades de género y sexo». Durante el turno de ruegos y preguntas, a consulta de EH Bildu, el Gobierno aclaró que los productos que se han utilizado en Plaiaundi, y que Bidasoaldeko Lagunak denunció, eran «naturales y no químicos» y prometió un informe detallado al respecto.
