IRUN. Nieves Erquicia acaba de llegar al cargo de presidenta de la asociación vecinal de uno de los barrios de Irun que más vida social, cultural y asociativa propia tienen. Esa característica es, para ella, "algo que hay que aprovechar, porque aunque hay muy buena sintonía entre los agentes del barrio, siempre se puede mejorar y trabajar de forma coordinada".
Acaba de llegar al cargo hace algunas semanas. ¿Por qué se decidió a optar a la presidencia?
Mis compañeros me animaron y me lancé, pero debo dejar muy claro que soy parte de un equipo de trabajo en el que hay una mezcla estupenda de gente joven y gente más curtida. Está Alfonso Barreiro como vicepresidente, Consuelo Martín en la tesorería, Maider Martín y Fernando Delgado como secretarios y los vocales, Fernando Arozena (infraestructuras), Itziar González (medio ambiente), Edurne Ogallar (gestión de locales), Itziar Egurbide (mayores), Luis Mayoral (mantenimiento) y el hasta ahora presidente Martxel Gorostidi (como vocal de logística). Sin todos ellos por detrás, yo no estaría aquí. Digamos que soy la cara visible de un gran equipo con ganas de trabajar por y para el barrio.
¿Es un lujo contar con gente joven, tal como están las asociaciones de vecinos hoy en día? Más de uno se queja de la falta de relevo...
La verdad es que sí, y esa gente joven es la que viene con muchísimas ganas de hacer cosas nuevas. A los que somos más veteranos nos motivan y nos ponen las pilas, si es necesario. Ojalá en todas las asociaciones pudieran tenerlos. En Ventas siempre ha habido muy buena sintonía entre la asociación de vecinos, la comunidad escolar, de la que yo provengo principalmente, los comerciantes, las sociedades, el grupo Gazte Landetxa... Eso es algo a lo que hay que sacarle cuanto más provecho mejor.
¿Qué objetivos se marca para sus primeros meses de presidencia?
El primero, y el que queremos que sea algo constante, ese trabajo en equipo, esa unión del barrio, de los vecinos y de todas las entidades. Porque haciendo fuerza juntos, podemos conseguir más y mejores cosas para el barrio que, en definitiva, somos todos. Esa unión existe. Una prueba es cómo se volcaron los comerciantes en las fiestas de Ventas de este año, en un momento complicado, para echar una mano y cuadrar los presupuestos. Pero podemos hacer muchas cosas.
El trabajo con entidades del barrio parece claro, dado que su equipo en la asociación se compone de gente vinculada a distintos colectivos del barrio, como las personas mayores o los jóvenes. ¿Y cómo piensa hacer partícipe al vecino de a pie?
Los vecinos de Ventas, cuando tienen problemas o necesidades, tienen ya la costumbre de acercarse a la asociación para pedirnos ayuda o consejo. ¿Qué más podemos hacer? Por ejemplo, una reunión abierta cada mes, con un día y hora fijados, que sea el punto de encuentro habitual para los vecinos, para hablar del barrio, exponernos sus ideas, sus quejas, sus necesidades... De cara al otoño, pondremos la fecha, será un día fijo de una semana fija de cada mes, para que sea más fácil que la gente se acuerde y pueda estar.
Por otro lado, Ventas tiene algunas reivindicaciones que sobreviven a cada junta y presidente de su asociación, como la de contar con un espacio cubierto. ¿Ve complicado que se pueda cubrir el frontón o tener una instalación deportiva cubierta?
Cubrir el frontón y contar con una instalación cubierta para cierto tipo de actividades sociales, festivas o deportivas en Ventas es una clara necesidad, y el Ayuntamiento lo sabe desde hace mucho tiempo. Siempre hemos tenido el no por respuesta pero no por ello dejaremos de insistir, porque es necesario. Sin ir más lejos, en las pasadas fiestas del barrio menos mal que teníamos una carpa que financiamos entre la asociación y los comerciantes, porque hizo mal tiempo y hubiéramos tenido que suspender buena parte del programa, de no ser por la carpa.
Hace algo más de dos meses que está en marcha la nueva línea de Irunbus entre Ventas y la zona de San Juan, además del taxibús que cubre la ruta al hospital. ¿Qué valoración hacen desde la asociación?
Hubo que pelear para que la línea de autobús fuera hasta San Juan, pero ha merecido la pena. Por lo que dicen muchos vecinos, la línea L2 de Irunbus está funcionando bien y también el taxibús, aunque nos gustaría que este cubriera más horas
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