«Sus nombres vivirían en nuestro aliento...» |
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Igandea, 2015(e)ko uztaila(r)en 12-(e)an 20:49etan |
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Noticia publicada en Diario Vasco sección Bidasoa,el domingo día 12 de Julio de 2015.
«Sus nombres vivirían en nuestro aliento...»
12 julio 201500:13
En un capítulo de 'Flores de la República' en el que se narra el primer homenaje rendido a los fusilados, tras descubrir la fosa, hay un fragmento que dice: «... a partir de ahora, sus nombres vivirían en nuestro aliento, en nuestros anhelos y luchas emancipatorias, igual que nutrieron las raíces de las fornidas hayas. Ya eran parte del universo, y aquella tierra que los sepultó era una tierra sin fronteras».
Mercedes López Cotarelo (16 años), Pilar Vallés Vicuña (17), Bernardo Usabiaga Jáuregui (17), Ángel Braña López (17), José María Arruti Idiaquez (18), Manuel Justo Alberdi (22), Agapito Domínguez (23), Víctor Genua (25), Jesús López Casado (26), Félix Luz Echeverría (27), Miguel J. López Pascual (39), Agustín Bermejo (40) y Vicente Argote (47). Son los nombres conocidos de quienes fueron fusilados en Pikoketa en agosto de 1936. No obstante, los asesinados fueron, al menos, dieciocho.
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Miguel Usabiaga (Autor de 'Flores de la República'): «He intentado alcanzar la máxima verdad sobre los fusilados en Pikoketa» |
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Igandea, 2015(e)ko uztaila(r)en 12-(e)an 20:45etan |
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Noticia publicada en Diario Vasco sección Bidasoa,el domingo día 12 de Julio de 2015.
Miguel Usabiaga (Autor de 'Flores de la República'): «He intentado alcanzar la máxima verdad sobre los fusilados en Pikoketa»
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SOBRINO DE UNO DE LOS ASESINADOS, HA PUBLICADO UN LIBRO SOBRE LO QUE OCURRIÓ EN AGOSTO DE 1936
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MIGUEL USABIAGA AUTOR DE 'FLORES DE LA REPÚBLICA'
12 julio 201509:39
La última vez que Marcelo Usabiaga habló con su hermano Bernardo fue un día de agosto de 1936, junto al convento de El Pilar, que en aquellos primeros días de la guerra se había convertido en el Cuartel General de la Defensa de Irun. «Subimos a Pikoketa», le dijo. Ni él ni diecisiete personas más volvieron a bajar. Asesinados por requetés, sus cuerpos permanecieron enterrados hasta que la llegada de la democracia, que permitió, 40 años después, comenzar a recuperar su dignidad y memoria. Miguel Usabiaga, hijo de Marcelo y arquitecto de profesión, ha aportado una nueva luz sobre esta historia con la publicación de 'Flores de la República. Los olvidados de Pikoketa'.
-¿Cómo se decide a rescatar esta historia y convertirla en libro?
-El de Pikoketa es un tema en el que estoy muy implicado. Como sobrino de Bernardo, he participado siempre en los actos de recuerdo y homenaje; para mantener la llama, el recuerdo. Al principio era algo familiar y reducido y, desde 2005, a través de la Asociación Republicana Irunesa Nicolás Guerendiain, se empezaron a hacer actos abiertos a toda la ciudadanía, y el Ayuntamiento de Irun también manda cada año unas flores al cementerio. En un momento dado me interesó profundizar más en esos hechos. Se conocía lo que la memoria ha ido transmitiendo, ya que alguno de los que estuvieron en Pikoketa sobrevivió y lo contó. Pero yo quise profundizar a través de archivos, intentar alcanzar la máxima verdad al respecto ya que había conjeturas variadas. También he querido profundizar en quiénes eran aquellas personas, más allá de sus nombres.
-Lo primero que llama la atención es lo jóvenes que eran... Recordemos por qué subieron a Pikoketa.
-Eran jóvenes comprometidos políticamente, la mayoría de la Juventud Socialista Unificada. También había algunos carabineros de oficio, leales a la República, de entre 30 y 40 años y que también fueron fusilados. Los republicanos habían cortado el paso a los franquistas por Endarlaza, y éstos cambiaron la ruta. Acumularon tropas en Oiartzun, donde ya había más de 3.000 soldados, para atacar Irun por el monte. Desde Pikoketa y otros puntos de Peñas de Aia, se les hostigaba con disparos para tratar de frenarlos. Unos días antes del 11 de agosto, mi padre, que también estaba muy implicado en la defensa de Irun, se encontró con su hermano y otros jóvenes en El Pilar. Bernardo le dijo que iban a subir a Pikoketa y fue la última vez que le vio. Aquellos jóvenes no eran expertos en las artes de la guerra, así que les cogieron y los fusilaron.
-Ocurrió la madrugada del 11 de agosto, cuando una columna de requetés tomó el caserío Pikoketa.
-Y tal cual los cogieron, los fusilaron. Hubo conjeturas sobre cómo ocurrió exactamente. Como se explica en el libro, tras cogerles estuvieron unas horas prisioneros y el coronel Beorlegui los mandó fusilar. Un cura que iba con los requetés le instó a que le permitiera confesarles antes. Éste, en sus memorias, da cuenta de que «intenté conducir a Dios a aquellas dieciocho personas...». De ahí que el dato de que fueron dieciocho los fusilados sea fiable.
-Este hecho produjo un gran impacto en Irun, según recoge en su libro.
-Así es, principalmente porque había muchos jóvenes, entre ellos, dos chicas; estaban en la flor de la vida y eran conocidas en Irun. Además, eran los primeros momentos de la guerra y ésta no se había manifestado aún en toda su crudeza.
-¿Qué fue de los familiares de los asesinados?
-Al escribir el libro, me ha parecido interesante saber no sólo quiénes eran los de Pikoketa, sino cuál fue luego el destino de sus familias. Ahí hay también un reflejo a escala de lo que fue la tragedia de España: casi todos sus familiares tuvieron destinos parecidos a tantos de los derrotados, que tuvieron que exiliarse.
-No fue hasta 1978 cuando esos familiares pudieron recuperar los restos de los fusilados.
-Cuando parecía que finalmente iba a instalarse la democracia, los familiares, entre ellos mi familia, empezaron a mover el tema. Hablaron con los ayuntamientos de Irun y Oiartzun; se hizo una excavación y recuperaron algunos huesos y objetos.
En mi familia siempre se habló de este tema, pero no ha ocurrido así en todos los casos, había mucho dolor. Con este libro he querido contribuir a mantener la memoria, pero lo primero es conocer los hechos. Muchas veces se habla de la memoria histórica cuando falta el primer eslabón, que es saber lo que pasó.
-Otro tema que aborda en el libro es el de los extranjeros que vinieron a Irun a luchar por la República.
-El 'calzador' que he utilizado para introducir ese tema es que conocemos trece nombres, pero todo indica que fueron dieciocho los asesinados. En esos momentos, había en Irun ferroviarios madrileños, mineros asturianos que vinieron a ayudar a la República... Y también extranjeros que habían llegado con ese mismo objetivo: polacos, italianos, belgas y franceses. Los otros que estaban en Pikoketa, cuyos nombres desconocemos, podrían haber sido alguno de esos extranjeros.
-En cuanto al género, 'Flores de la República' está a medio camino entre el ensayo y la narrativa.
-La historia está contada no como una novela, pero casi. No quería que el lector asistiera a despliegue de datos; sino que he intentado que durante la lectura sienta que hace esa misma investigación que yo he realizado. El lector va entrando en ese proceso de investigación y, con ciertas dosis de intriga, descubre lo que pasó a través de entrevistas, visitas a archivos u otras fuentes.
Miguel Usabiaga, con su libro, frente a El Pilar. / F. DE LA HERA |
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Oiasso se acicala para el verano |
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Igandea, 2015(e)ko uztaila(r)en 12-(e)an 20:39etan |
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Noticia publicada en Diario Vasco sección Bidasoa,el domingo día 12 de Julio de 2015.
Oiasso se acicala para el verano
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AL CONTRARIO QUE OTRAS MUESTRAS TEMPORALES, ÉSTA NO SE ENCUENTRA EN LA SALA MULTIUSOS, SINO QUE COMPARTE Y COMPLETA EL ESPACIO DE LA EXPOSICIÓN PERMANENTE
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LAS PIEZAS ARQUEOLÓGICAS DE LA EXPOSICIÓN 'HISTORIAS DE TOCADOR' INUNDAN EL MUSEO ROMANO
12 julio 201509:38
El Museo Oiasso, desde su apertura hace ya nueve años, asume varias funciones y pretende cumplir diversos objetivos. Debe ser el lugar de referencia para trasladar a la población el conocimiento que existe sobre su pasado romano, por supuesto. También debe ser un espacio para dar a conocer entre los escolares propios, y los de un entorno cada vez mayor, los modos de vida, la cultura, la ciencia, la religión y la tecnología de la gloriosa época clásica. Por su condición de museo, tiene el cometido de dinamizar y divulgar la cultura en su más amplio sentido. Y en un sentido más prosaico, pero no por ello menos relevante, está llamado a ser tractor turístico de una ciudad enclavada entre destinos que reciben miles de visitantes a lo largo del año, especialmente en verano.
Para esta época estival, Oiasso se ha puesto guapo. Ha traído desde el Museo de Arqueología de Catalunya (MAC), en Barcelona, una exposición de lujo. Se trata de una muestra itinerante, comisariada por Teresa Carreras, que presenta los secretos de tocador de romanas y romanos, porque, como la propia Carreras destacó el viernes durante la inauguración, «ellos también eran muy coquetos» y por ejemplo, contra la alopecia, «usaban bisoñés y se peinaban hacia adelante».
Los baños públicos, los peinados elaborados, los perfumes, los ungüentos y aceites... hasta los tatuajes y los piercing. La Roma clásica sabía ya de muchos de los recursos que desde la modernidad en adelante ha venido utilizando el ser humano contemporáneo para presentarse en sociedad con el mejor aspecto posible. Carreras ha conformado una colección digna de no perderse con decenas de restos arqueológicos de pequeño y gran tamaño: ungüentarios, aceiteros y otros recipientes; agujas para sujetar peinados, cabezas de mármol con curiosos peinados, dos esculturas a escala real... y varias piezas que destacan entre las demás. La primera, sin duda, el mosaico de las 'tres gracias de Venus' que preside desde la instalación de esta exposición la recepción del Museo. Aunque pequeña en volumen, Carreras destacó la figura de la 'Venus de Ampurias', «en torno a la cual gira la exposición en realidad, porque ella era la Diosa de la belleza». También resaltó la cabeza de la Dama Flavia, la parte superior de una escultura de bronce que, precisamente por estar realizada en ese material, es una pieza única entre los fondos del MAC barcelonés.
En la época clásica ya se utilizaban maquillaje, perfumes, ungüentos, bisoñés, tatuajes y piercings
Exposición diferente
Esta muestra, 'Historias de tocador. Cosmética y belleza en la Antigüedad', se diferencia en muchas cosas de otras que hayan pasado por Oiasso.
La primera, por si no había quedado clara, es su enorme y variada aportación de restos arqueológicos preservados desde la antigüedad. La segunda es que no se limita, como ha sido norma hasta ahora en las muestras eventuales, a la sala multiusos de la planta baja del museo, sino que se extiende por todo el edificio, compartiendo espacios con la colección permanente y completándola, precisamente, con aquello de lo que más adolece. La tercera es que combina los objetos de hace dos milenios con otros de menos de un siglo que «sirven para situar al visitante en cada uno de los cuatro bloques temáticos que conforman la exposición», explicó Carreras.
Esa combinación que exhibe 'Historias de tocador' fue innovadora dentro de las propuestas expositivas del propio MAC. «Fue un éxito y partir de ella hemos profundizado en esa línea», explicó el director del museo arqueológico catalán, Josep Manuel Rueda, que se acercó hasta Irun para participar en la inauguración de esta muestra, «primera colaboración entre estos dos museos, que espero que abra para el futuro una relación permanente en los dos sentidos». En ese acto inaugural, al que asistieron cerca de setenta personas, se estreno en su cargo la nueva delegada de Cultura del Ayuntamiento de Irun, Juncal Eizaguirre. «Es un honor que mi primer acto público como delegada sea en este escenario, un lugar que guarda como pocos la historia y la cultura de la ciudad», dijo la edil. Un museo más interesante que nunca gracias a esta muestra temporal.
Esculturas. La muestra incluye algunas piezas de gran tamaño.
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Eloy Maza ofrece el sábado una clase de Joy-Ga gratuita dentro de su peregrinaje solidario |
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Ostirala, 2015(e)ko uztaila(r)en 10-(e)an 08:54etan |
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Noticia publicada en Diario Vasco sección Bidasoa,el viernes día 10 de Julio de 2015.
Eloy Maza ofrece el sábado una clase de Joy-Ga gratuita dentro de su peregrinaje solidario
10 julio 201500:33
La iniciativa 'El Camino con Barry' arrancó desde la localidad madrileña de Boalo el pasado 14 de junio. Se trata de un viaje en bicicleta que tiene como misión recaudar fondos en la lucha contra el cáncer infantil en su ruta por el Camino de Santiago.
El protagonista es Eloy Maza, que esta semana ha llegado a Irun para realizar una actividad que repite cada domingo en las ciudades que visita. En esta sesión, abierta a todo el mundo, gratuita y que tendrá lugar este domingo, de 11.30 a 13.30 horas, en el polideportivo Azken Portu, Eloy Maza dará una clase de Joy-Ga. En grupo, los participantes mezclan ejercicios de lenguaje corporal, estiramientos, respiración y observación del mundo interior de cada uno, combinando el yoga con técnicas de risoterapia con el objetivo de pasarlo bien e interactuar entre los asistentes.
Tras pasar estos días por Irun, Eloy Maza espera llegar a Galicia en el mes de septiembre después de haber recorrido alrededor de 2.000 kilómetros. Durante su viaje, busca recaudar fondos para varias asociaciones, como la Fundación Blas Ponce, que trabajan ayudando a niños con cáncer.
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