En Irun, el Pleno tuvo lugar en la tarde-noche del miércoles. En la sesión, que se prolongó casi tres horas y media, se aprobó esta modificación de créditos del presupuesto de 2016, con una aportación de 4,1 millones en la que destaca, sobremanera, la aportación de 1,4 millones de euros para el fomento de la vivienda pública en alquiler.
El acuerdo contó con el voto favorable del gobierno de coalición PSE-PNV y del Partido Popular, mientras que EH Bildu y Sí Se Puede Irun (SPI) votaron en contra, precisamente con la fórmulas a emplear para impulsar la vivienda de alquiler como punto principal de discordancia.
El propio edil de Hacienda, Miguel Ángel Páez, destacó en la sesión que “hay una plena coincidencia” de todos los grupos políticos en “dar un impulso, desde el Ayuntamiento, a la vivienda de alquiler, acompañando y facilitando la búsqueda de acuerdos con el Gobierno Vasco, que es el competente en esta materia y al que hay que exigir que haga sus deberes”.
El gobierno municipal se propone “con estos 1,4 millones, que se añaden a los 500.000 euros que ya figuraban en el presupuesto, multiplicar el efecto positivo de ese dinero en la puesta en marcha de vivienda de alquiler, por la vía de acuerdos para impulsar su construcción, por un lado, y por la de ayudar a la puesta en el mercado de alquiler público de viviendas vacías que son propiedad de particulares”, detallaba el jueves el alcalde, José Antonio Santano.
APUESTA ARRIESGADA En el Pleno, el portavoz de SPI, David Soto, criticó que “el gobierno pueda apostar este dinero a la carta del impulso al ámbito de San Miguel-Anaka, con el riesgo de que al final ese dinero se quede sin gastar por la falta de tiempo para gestionarlo este mismo año”.
El delegado de Urbanismo, el jeltzale Xabier Iridoy, destacó “el trasvase que se ha dado en estos últimos años de la demanda de vivienda en modalidad de compra a la de alquiler” y recordó que “en los próximos meses estarán listas las 80 viviendas de alquiler que el Gobierno Vasco ya está construyendo en Oinaurre”.
Sobre San Miguel-Anaka, Iridoy aseguró que el gobierno “hará todo lo posible por lograr acuerdos para impulsar el alquiler, y si no es posible para este año, se buscarán otras fórmulas para que este presupuesto se ejecute igualmente”.
Por su parte, desde EH Bildu, su portavoz, Oinatz Mitxelena, recordó que “la demanda de vivienda en alquiler es de siempre, no sólo de los últimos años” y calificó el discurso del gobierno en este tema de “vacío y sin ideas”, por no apostar por otras vías “como la puesta en el mercado de la vivienda vacía con fórmulas de compra, convenio o intercambio, en vez de apostar casi de forma exclusiva por la construcción de vivienda nueva”.
AÑADIDO EN HONDARRIBIA En el caso de Hondarribia, el incremento presupuestario de 5,35 millones contó en el Pleno, celebrado el jueves, con el voto favorable del PNV (que tiene mayoría absoluta) y de PSE y PP, y con la abstención de Abotsanitz y el voto en contra de EH Bildu.
Este dinero adicional se destinará a las obras de reurbanización de las calles Jabier Ugarte y Santiago Konpostela, que suponen 1,37 millones y arrancarán en octubre; a una aportación de 1,6 millones para la sociedad Hondarribia Lantzen, a otra al Gobierno Vasco (de 700.000 euros) para seguir con las obras en la ladera de Higer, a las mejoras en el exterior de Kasino Zaharra (195.000 euros) o a mejoras en las murallas (212.600 euros), supeditadas a la obtención de financiación del programa europeo POCTEFA.
LA CIFRA
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Son los millones de euros que suman los remanentes que han tenido Irun (9 millones) y Hondarribia (7) en la liquidación del ejercicio del año 2015.
DETALLES
Tres líneas. El añadido presupuestario de Irun se articula en tres líneas. La primera, la de impulsar la vivienda y las políticas de Bienestar Social (con fondos destinados a las nuevas competencias que en unos meses deberán asumir los consistorios); la segunda, al fomento de la economía y el empleo (con ayudas a la contratación y el emprendizaje); y la tercera, a mantenimiento y obras.
Mociones. En ambos plenos se aprobaron mociones alternativas a las presentadas por EH Bildu en torno a la AGI. En ellas, Irun (con voto favorable de PSE, PNV y PP y con EH Bildu y SPI en contra) y Hondarribia (con EH Bildu y Abotsanitz en contra) se posicionan a favor del cambio que la Diputación Foral pretende impulsar con el programa Elkar-Ekin
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