IRUN - Para Agustín González, los cinco años de presidente del Foro Ciudadano han sido “intensos, no solo por el trabajo en temas de la ciudad, sino porque también implica tener una agenda de compromisos y actos en los que te toca representar” al propio movimiento.

Acaban de trasladar su sede al nuevo espacio de Palmera-Montero Gunea. ¿Qué va a suponer esto para el Foro Ciudadano Irunés?

-Por un lado, pasamos a ocupar un espacio nuevo, más amplio y más accesible, tanto para nuestras reuniones, como para que cualquier ciudadano pueda acercarse a nosotros. Pero lo que más valoro de estar en el hotel de asociaciones de Palmera-Montero es que el edificio dispone de salas para organizar pequeños eventos como charlas o reuniones abiertas, y sobre todo, el compartir espacio con otras asociaciones y colectivos sociales. Esa interacción y esa cercanía estoy seguro de que va a dar frutos en forma de colaboración entre unos y otros.

¿Cómo valora el cambio que ha tenido estos años el panorama político irunés, con un gobierno en coalición entre PSE y PNV, la fuerte irrupción de Sí Se Puede Irun y el retroceso de EH Bildu y PP, pasando de cinco a tres y dos ediles, respectivamente?

-Hemos pasado de un mandato en el que el PSE estaba obligado a buscar apoyos, y lo hizo en unos y otros, a otro en el que hay un gobierno en coalición que tiene claro su horizonte, con un programa de gobierno compartido. Ambas fórmulas tienen sus pros y sus contras. Estamos en un momento en el que las cosas de la ciudad son compartidas, como mínimo, entre las dos fuerzas del gobierno. Y eso obliga a las partes a ceder en sus postulados más propios. Luego, está claro, y lo vimos en el debate de presupuestos, que el PP está más cerca de ese Gobierno de lo que puedan estarlo SPI o EH Bildu.

¿Hablando de presupuestos, cómo valora lo ocurrido con las cuentas participativas de este año?¿Tanto ha influido el hecho de tener que utilizar la Irun Txartela para votar?

-Creo que la Irun Txartela ha garantizado el principio de una persona, un voto, evitando la influencia y la capacidad que podían tener los colectivos, movilizando el voto de sus integrantes. Los algo más de 700 participantes son la medida real de dónde estamos en materia de prespuestos participativos. Esa es la medida real. ¿Que es poco? Sin duda. Pero hace tres años no había nada. Ahora, los irundarras tenemos la oportunidad de decidir, cada año, el destino que se da a millón y medio de euros. Creo que pese a lo ocurrido, no está en debate la continuidad de la participación en los presupuestos. Otra cosa es cómo implicar más a la gente, porque hay otros ámbitos, como el programa El alcalde en los barrios, en los que la participación es notablemente superior.

¿Qué nuevos cauces creen que debe abrir la Ordenanza de Participación Ciudadana, que ahora mismo está en elaboración?

-La ordenanza está un poco parada, porque hay un consenso para que se base en las posibilidades que ofrece la nueva Ley Municipal vasca, ley que está en el aire por un recurso de inconstitucionalidad del Estado. Hablamos de fórmulas como las consultas y referendos sobre asuntos locales. Preferimos tener parada la ordenanza y seguir con las fórmulas de participación actuales, a hacer una norma que sea poco ambiciosa.

¿Qué asuntos ve encarrilados y qué otros cree que urge resolver para el futuro de Irun?

-Creo que en el último año se ha avanzado, con el acuerdo de gobierno en la Diputación, para impulsar la ronda sur de Irun y la residencia de Arbes, que son dos demandas históricas. Las nuevas frecuencias del Topo también son un logro, tras años de pelea por la federación de vecinos Oiasso 2000 y creo que se han dado pasos sólidos para impulsar, por fin, la vivienda pública en alquiler. En cuanto a asuntos pendientes, nos preocupa que no se haya avanzado nada con la llegada del TAV y la regeneración del espacio ferroviario de Irun, desde la firma del protocolo en 2011; el tiempo se echa encima para el traslado de las instalaciones deportivas de Plaiaundi y hay que seguir, incansables, en la lucha contra el paro y la creación de oportunidades para la gente
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