El Pleno de la Corporación aprobó en su sesión del miércoles un incremento de 3,4 millones de euros en el presupuesto municipal que se destinará a programas de ayudas y a inversiones mediante una serie de partidas que se financiarán con cerca de 2,7 millones de los casi 5 que arrojó como balance positivo la liquidación de 2013 y una primera parte del dinero que el Gobierno Vasco comprometió en su presupuesto para proyectos del Ayuntamiento de Irun.
Las ayudas e inversiones ponen el foco especialmente en San Miguel-Anaka, respondiendo al compromiso plenario de actuar para paliar en lo posible los intereses lesionados por el retraso continuo del proyecto de desarrollo de San Miguel-Anaka. «Para pasar de las palabras a los hechos», decía el delegado de Hacienda, Miguel Ángel Páez, «hace falta consignar partidas. Hoy lo podemos hacer gracias al resultado de la gestión municipal de 2013». Esas partidas incluyen programas de ayudas para rehabilitación de edificios en las calles Agerre, Jaizkibel y San Sebastián; primeros pasos para reurbanizaciones en el ámbito; traslados de empresas de esa zona a otras de la ciudad; financiación para otras de las obras previstas en el colegio Lekaenea (sin inversiones durante años por encontrarse fuera de ordenación, afectado también por el planeamiento de San Miguel-Anaka)...
El alcalde ya había explicado por la mañana que la modificación incluía otros «asuntos discutidos por esta Corporación que acometemos con esta modificación» como los «desfibriladores para instalaciones deportivas municipales», que solicitó el PP; «la redacción del proyecto de un ascensor que conecte Luis Mariano con Artaleku» propuesta por el PNV, o las ayudas a la adquisición de material escolar en comercios de la ciudad, iniciativa del Gobierno.
Discrepancia por las formas
El PSE encontró el respaldo de PNV y PP para sacar adelante el dictamen. Ezker Batua se abstuvo porque «se trataba de una cantidad de dinero importante, como una segunda parte del presupuesto, y el Gobierno no ha tratado de consensuarlo con el resto de los grupos», explicó su portavoz, Manuel Millán. En la misma línea pero con más dureza se expresó Oinatz Mitxelena (Bildu) que acusó a Santano y Páez de «faltar al compromiso que expresaron el año pasado, cuando tras una modificación de créditos planteada de manera similar, aseguraron que en próximas ocasiones sería diferente, pero no hemos visto nada de eso. El alcalde sigue hablando de transparencia y participación, pero sigue actuando sin hablar con el resto de los grupos». Más adelante, su compañero de grupo, Juan Carlos Martínez, añadió que Bildu tampoco compartía «las prioridades del Gobierno» y enumeró cuáles hubieran sido las de la coalición: «la iluminación en la entrada a la ikastola Txingudi por Urdanibia, eliminar recortes en educadores de calle, ampliar el presupuesto de colonias abiertas hasta recuperar el que había, reabrir ludotecas...».
Aunque le achacó el mismo defecto de forma y también que podría haber habido «mayor inversión, porque hay más recursos», Xabier Iridoy anunció que EAJ-PNV votaría a favor porque el contenido «es de urgencia y hay que realizarlo, aunque echamos cosas de menos», algunas de las cuales apuntó. También comentó otras ausencias Juana de Bengoechea (PP), aunque señalando la importancia de las incluidas. Ella recordó al resto de portavoces que «todos sabíamos que esta modificación iba a venir. Hay que estar 'al loro'. Nosotros le trasladamos nuestras propuestas al Gobierno sin esperar a que ellos movieran ficha y lo volveremos a hacer en la próxima modificación», para la que ya anunció algunas de las inversiones que reclamará su grupo.
Páez, por su parte, recordó a los grupos que «toda la información sobre esta propuesta se ha transmitido en la Comisión de Hacienda, antes de Semana Santa, y nadie nos ha hecho llegar propuesta alguna después, en más de 15 días. Estamos abiertos», añadió, «a discutir las propuestas de los grupos, por supuesto, y me voy a empeñar en que en próximas modificaciones esa sensación que algunos grupos tienen, y que puedo entender, la podamos evitar. Pero en esta ocasión, ya saben que el contenido de este dictamen responde a decisiones que habíamos tomado entre todos en este Pleno».
Por la mañana, el alcalde había avanzado que la intención del Gobierno es que el mes próximo pueda presentar ante el Pleno una nueva modificación «de menor cuantía. Hay que ser prudentes y dejar margen para actuar ante necesidades que vayan surgiendo, sin olvidar», advirtió, «que, con esta modificación y la que se hizo en noviembre al presupuesto de 2013, hemos puesto en marcha más de seis millones de euros extraordinarios en seis meses».