11 diciembre 201500:57
Ayer, 10 de diciembre, se celebró el Día Internacional de los Derechos Humanos. El Ayuntamiento de Irun se ha sumado a la llamada realizada por el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, en la que «insta a todas las naciones y organizaciones para que volvamos a comprometernos a garantizar las libertades fundamentales y a proteger los derechos humanos de todos».
La delegada de de Cooperación al Desarrollo, Valores y Derechos Humanos, Mónica Martínez, recordó que «desde lo cercano, desde lo municipal, en Irun trabajamos por el pleno desarrollo de los Derechos Humanos en la ciudad, así como por el desarrollo una auténtica cultura de paz y convivencia».
Una de las iniciativas que impulsa el ayuntamiento en este sentido es la denominada 'Irun, ciudad por la paz y la convivencia', que enmarca distintos programas. El Pleno juvenil es una de las actividades más visibles, dirigida a escolares de 3º de la ESO y que tiene por objetivo «la educación de la juventud irunesa para la defensa, el respeto y la garantía del cumplimiento de los derechos humanos», así como ser «un espacio de diálogo y reconocimiento de diferentes sensibilidades». La próxima edición del Pleno juvenil tendrá lugar el 5 de febrero, y participarán 354 estudiantes de Erain, Toki-Alai, Txingudi Ikastola e Irungo La Salle.
Memoria histórica
Otro de los programas es Orbel-Haizea, que tiene como objetivo principal recuperar la memoria histórica a través del relato de personas mayores que sufrieron vulneraciones de los Derechos Humanos, dando así a conocer su historia personal a las nuevas generaciones. Orbel-Haizea tiene dos versiones, la infantil y la juvenil. En la primera se trabaja este año con el alumnado de 6º curso de primaria de Belaskoenea, Txingudi Ikastola, El Pilar, San Vicente de Paul y Eguskitza, en total 307 estudiantes de 11 y 12 años. En la versión juvenil están participando 337 jóvenes de 16 a 17 años del Instituto Pío Baroja y el PCPI Bidasoa.
Otras de las acciones emprendidas por el ayuntamiento son la creación de una sección sobre diversidad religiosa en la web municipal, el haberse unido a la Red de Ciudades Solidarias para las personas refugiadas o, el pasado 20 de noviembre, la redacción de una declaración institucional de adhesión a la Convención sobre los Derechos del Niño.
