El drama que están viviendo cada vez más familias vascas podría verse aliviado en poco tiempo. El paro provocado por la crisis económica ha disparado la cifra de desahucios de personas que, de la noche a la mañana, se ven incapaces de pagar la cuota de hipoteca que en su día firmaron con su banco. Cada día que pasa, seis familias son desalojadas de sus casas por orden judicial.
El Gobierno Vasco quiere entrar de lleno en el asunto y trabaja desde hace semanas en un programa de mediación entre bancos y familias con problemas para pagar las hipotecas, con el objetivos de evitar los desahucios y buscar una salida lo menos traumática posible para las dos partes. Plataformas ciudadanas de afectados por los desahucios y la cúpula judicial vasca ya han dado el visto bueno al borrador del plan. Pero falta una pieza imprescindible para que este programa no nazca 'cojo' y vacío de contenido. La complicidad de bancos y cajas de ahorro es necesaria. Para conseguirla, el Gobierno Vasco se reúne este mismo viernes con entidades financieras para abordar el plan de mediación con el que quiere poner freno a la sangría de los desahucios en Euskadi.
La cita tendrá lugar en Vitoria. En ella participarán miembros de los departamentos de Justicia y Administración Pública y de Vivienda, Obras Públicas y Transportes del Gobierno Vasco junto a representantes de 21 entidades financieras con presencia en Euskadi, según confirmaron a DV fuentes del Gobierno Vasco.
El encuentro es de vital importancia para el futuro del plan de mediación en el que el Gobierno Vasco lleva tiempo trabajando. De hecho, el pasado viernes tuvo lugar una reunión en la que participaron la viceconsejera de Justicia, María Victoria Cinto, miembros de la plataforma Stop Desahucios y de la cúpula judicial vasca, encabezada por el propio Juan Luis Ibarra, presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, que fue el primero en lanzar una propuesta para buscar mecanismos que eviten los desahucios. No hay que olvidar que, además del drama humano que suponen, el trabajo por estos expedientes se acumula en las sedes judiciales.
A la reunión del pasado viernes le ha seguido otra, este mismo lunes, entre representantes del Departamento de Vivienda y miembros de la plataforma Stop Desahucios. En ella, el director de Planificación de Vivienda, Mario Yoldi, explicó las líneas generales del programa de mediación que el viernes presentarán a las entidades financieras y que está abierto a nuevas aportaciones. La iniciativa es novedosa en todo el Estado.
El objetivo principal del plan es articular un mecanismo de mediación que evite que aquellos propietarios que estén desempleados o tengan problemas para pagar la hipoteca puedan encontrar fórmulas para renegociarla.
Comisión de expertos
Según explica Xabier Soto, uno de los representantes de Stop Desahucios presentes en la reunión del viernes en Vitoria, el programa de mediación estaría formado por una «comisión de juristas expertos en ejecuciones hipotecarias y economistas». Esta comisión estudiaría caso por caso las posibilidades de cancelar la deuda de forma ordenada, «con el objetivo de que no pierda ninguna de las dos partes». Por ejemplo, se podría valorar incrementar el período de pago de una deuda en el tiempo, reducir el montante de las cuotas mensuales...
Entre las soluciones que baraja Stop Desahucios, proponen que personas mayores pendientes de desahucio puedan seguir en su domicilio abonando un alquiler vitalicio en consonancia con sus ingresos, aunque el banco se quede con la propiedad de la vivienda.
El resultado de la mediación podría ser válido para los casos que todavía no han llegado a la Justicia y para los que están judicializados. «Si el procedimiento ya está abierto, el acuerdo de la mediación se podría trasladar al juez que, visto que las dos partes están de acuerdo, lo aceptaría como si fuera un laudo arbitral», añade el representante de Stop Desahucios.
Eso sí, para que todo llegue a buen puerto, la clave está en la participación de las entidades financieras, que tendrían que entrar voluntariamente en el programa de mediación y asumir el resultado de la misma.
¿Rentable para los bancos?
Pero, ¿tendrían algo positivo que ganar con la mediación? En opinión de Xabier Soto, puede que haya llegado el momento en el que al banco le sea más rentable permitir que la familia se quede en la casa, aunque pague una menor cuota al mes, que seguir acumulando pisos vacíos que no pueden vender en el mercado.
Según el representante de Stop Desahucios, «cada parte -en alusión a los bancos- tiene que asumir su responsabilidad porque no sólo se puede responsabilizar a los afectados de lo que se está viviendo».
El programa incluiría además un servicio de asesoramiento gratuito para aquellas personas que, a partir de ahora, contraten una nueva hipoteca conozcan los derechos y deberes a los que se ha comprometido.
La mediación, además de asegurar ingresos a la entidad financiera y permitir a la familia permanecer en la casa, aliviaría el trabajo de las sedes judiciales, en donde cada día se tramitan más expedientes de desahucios.
Según los datos del Consejo General del Poder Judicial, en los nueve primeros meses del año pasado se contabilizaron 1.591 desahucios en Euskadi, por lo que todo hace indicar que se superarán los 1.963 desahucios de todo 2010, que fue un año récord. Por territorios, en los nueve primeros meses de 2011 se contabilizaron 292 desahucios en Gipuzkoa (381 en 2010), 939 en Bizkaia (1.161 en 2010) y 360 en Araba (421 en 2010).
Desde la plataforma ciudadana Stop Desahucios valoran positivamente el programa de mediación del Gobierno Vasco y animan al Ejecutivo a seguir adelante con él, incluso si los bancos no lo respaldan. Eso sí, en ese supuesto, reconocen que nacería cojo. «El problema de los desahucios se va a incrementar. Nos salpica a todos y nadie sabe si mañana le va a tocar a él. Si no se toman medidas, la propia Administración va a tener que asumir la asistencia a las personas desahuciadas. Tal y como va la cosa, la Administración no va a poder», afirman.
La plataforma Stop Desahucios realizará hoy una presentación de su trabajo, a las 19.30 horas, en la casa de cultura Xenpelar de Errenteria.
