Desde hace poco más de una semana existe un lugar en Irun que acoge a niños, mayores, padres y abuelos. Potxolito es una boutique cafetería, situada en Luis Mariano, que ofrece un espacio diferente e innovador para la ciudad.

«Nos dirigimos a las madres y padres que, como yo, quieren un espacio donde poder tomarse un café mientras los pequeños están entretenidos», explicaba Tatiane Pereira, co creadora del proyecto. El espacio está dividido en diferentes áreas a fin de que las familias se acomoden y disfruten de un tiempo de descanso. Los más pequeños, entre 0 y 4 años, tienen un espacio reservado en la entrada. Protegidos del resto, pueden jugar o pintar en una pared de pizarra. Por otro lado, el entorno también está pensado para que los padres conecten con sus hijos y se animen a jugar con ellos. «Queremos que todo el mundo pueda venir y disfrutar del variado abanico de ofertas», aseguraba Pereira.

Otro de los aspectos innovadores de Potxolito es que ofrece una serie de talleres organizados mensuamente, los lunes, martes y jueves. Por ahora existen tres talleres diferentes. Dos de ellos, para niños de 5 a 10 años, son de manualidades, uno sobre animales y otro sobre alimentos y países del mundo. Mientras que el tercero es un taller de yoga para niños de 3 a 6 años. La cafetería también ofrece la oportunidad de celebrar cumpleaños personalizados y exclusivos en la planta baja del local. «Queremos tomar tradiciones que hay en otros países como en Brasil, donde los cumpleaños son verdaderas fiestas, y adaptarlas a nivel local», declaraba Pereira.

A pesar del poco tiempo que lleva abierta, la cafetería ya ha recibido a un número considerable de visitantes, sin embargo, como afirma Pereira, «todavía podemos mejorar algunos aspectos. Tenemos en mente algunas ideas y proyectos que queremos terminar de desarrollar en las próximas semanas». Una de las propuestas que todavía tienen pendientes tiene que ver con la terraza. «Queremos montar un área para los niños, similar a la que tenemos dentro, que acompañe las mesas de fuera», explicaba Pereira.

La oferta gastronómica de Potxolito es amplia y variada. «Del mismo modo que el lugar se adapta a las necesidades de las familias y de los niños, la carta no iba a ser menos», confirmaba Pereira. Los más pequeños tienen un puré especial para ellos y los que ya son un poco más mayores tienen la oportunidad de probar un menú infantil con hasta cuatro opciones diferentes. Además, todas las propuestas se realizan con productos naturales y frescos. «Tenemos dos chefs, una que se dedica a la respostería y otra a la oferta salada, y cada día realizan los pintxos y dulces», aseguraba Pereira.

Potxolito es ahora una marca registrada que en la cafetería pone a la venta algunos de los productos que llevan su nombre. Se trata de artículos originales, en un futuro personalizados, para niños y mayores. La web de Potxolito ofrece más información respecto a los talleres y demás áreas de la cafetería.