El comedor social y el punto de encuentro registraron 543 usuarios el año pasado

543 personas utilizaron en 2015 los servicios del comedor social y del punto de encuentro de Irun, ubicados en uno de los edificios del Antiguo Hospital de la plaza Urdanibia. El delegado de Bienestar social, Sergio Corchón; Feli Goikoetxea, técnico de intervención comunitaria; y Nadia Fabo, de Rais Euskadi, empresa que coordina ambas instalaciones, ofrecieron ayer el balance y los datos del año pasado de este servicio.

Además de cubrir «necesidades básicas de alimentación e higiene», estos recursos son una herramienta para favorecer «la inclusión social», señaló Sergio Corchón. El comedor social y el punto de encuentro están atendidos por tres profesionales en todo momento y abren de lunes a viernes en horario de mañana y tarde.

En 2015, por el comedor social pasaron 192 personas (10 menos que en 2014), y 537 utilizaron los servicios del punto de encuentro. Siendo el total de usuarios de ambas instalaciones 543, se observa que «todos los que acudieron al comedor, salvo 6 personas, acudieron también al punto de encuentro», concretó Nadia Fabo.

En el comedor, cuyo servicio corre a cargo de Gureak, se sirvieron un total de 18.523 menús el año pasado, atendiendo de media a 50,7 personas al día. Hay meses, no obstante, en los que esta media sube hasta 66 menús servidos cada día. El año pasado, el comedor social aumentó su capacidad hasta los 90 comensales.

En cuanto al perfil de los usuarios, el 80% eran hombres y el 20% mujeres. Por edades, destaca ligeramente sobre las demás la franja de 40 a 44 años. Respecto a la procedencia, «un 24% son personas de la CAV, un 13% del resto del Estado, el 15% de la Unión Europea y el 26% de la zona del Magreb», concretó Feli Goikoetxea. El servicio ofrece tres tipos de menú: el basal, que incluye todo tipo de alimentos; el vegetariano y el especial, este último para quienes precisan de una dieta concreta por motivos médicos.

El área de Bienestar social regula el acceso a este servicio, estableciendo una serie de criterios: es necesario ser mayor de edad, estar empadronado o establecido en Irun, no tener ingresos por importe equiparable a la RGI y estar en riesgo o en situación de exclusión social.

En cuanto al punto de encuentro, esta instalación ofrece varios servicios: duchas, que se utilizaron 1.724 veces; lavandería, que ofreció 1.257 servicios a 145 usuarios; y el espacio de acompañamiento, que acogió a 278 personas.

Este último recurso tiene una importancia especial, «tanta como el comedor o más», subrayó Nadia Fabo. El espacio de acompañamiento ofrece un lugar en el que tomar un café, leer, descansar, utilizar un ordenador, realizar actividades lúdicas como jugar a cartas... Fundamentalmente, «es un medio para socializar». La coordinadora de Rais recordó que entre quienes acuden «hay personas que no cruzarían palabra con otra gente en todo el día» de no ser por este espacio.

Los trabajadores elaboran con cada uno «un itinerario personal, con objetivos concretos», del que los usuarios son «protagonistas absolutos». Se les transmite información y educación para la salud, se les escucha en momentos de crisis, se les ayuda a buscar empleo o a realizar gestiones con las administraciones... Nadia Fabo recordó, no obstante, que también hay personas que «no quieren mejorar o salir de su situación actual». La coordinadora destacó también la puesta en marcha de talleres, a propuesta de los propios usuarios. «Todos los meses se celebra una asamblea con ellos, en la que pueden plantear sus sugerencias». Entre las actividades que se llevaron a cabo en 2015 hubo talleres de ajedrez o naipes, visitas al parque ecológico Plaiaundi o al Museo de las Mariposas... «Intentamos también que participen en actividades comunitarias».

Respecto al perfil de los usuarios del punto de encuentro, en 2015 el 75% fueron hombres y el 25% mujeres. El 21% procedían de la CAV y el 10% del resto del Estado, el 24% de otros puntos de Europa y el 22% del Magreb.