En armonía con la diversión

Medio centenar de jóvenes irundarras apuran hoy sus últimas horas en el parque de aventura Irrisarri Land, en la localidad navarra de Igantzi. Desde el pasado jueves el entorno natural en el que se encuentran ha sido su segunda casa, rodeados por diversión en todas direcciones en forma de atracciones y actividades con las que han corrido, se han tirado en tirolina, han conducido un segway, han aprendido cosas nuevas o, simplemente, han abierto sus sentidos a la naturaleza.

En total son seis los grupos que este verano disfrutan del programa de colonias municipales en Irrisarri Land. Una escapada de una semana para jóvenes de entre 8 a 16 años que se lo pasan en grande allí. Los delegados Sergio Corchón (Bienestar Social), Mónica Martínez (Cooperación) y Josune Gómez (Juventud), acompañados por el concejal socialista Mikel Maestro, visitaron ayer las instalaciones del parque y comprobaron en primera persona que los chavales disfrutan con todo lo que hacen. Durante la expedición, el gerente de Irrisarri Land, Joxe Elgorriaga, y Raúl Giralde, coordinador de colonias, fueron sus anfitriones y les hicieron de guía.

Durante estos días, los jóvenes irundarras han podido disfrutar levantándose con el piar de los pájaros o con «alguna sorpresa», comenta Elgorriaga, que pone como ejemplo una anécdota: «Una mañana Baxi -mascota del parque- se asomó por uno de los ventanales de cristal. Una niña lo vio y enseguida despertó al resto que, como les cerramos la puerta por la noche, se quedaron con la cara pegada al cristal totalmente asombrados ante lo que estaban viendo».

Larga lista de posibilidades

Además de todas las sorpresas con las que se han encontrado, estos días han podido disfrutar de una lista casi infinita de actividades: bicicleta, tiro con arco, escalada, camas elásticas, segway, 'laser tag' (similar al paintball pero con láser), recorrido aéreo, ping pong, 'disc golf' (juego que consiste en encestar un frisbi en diferentes canastas), etc. y, por supuesto, las tirolinas, que «son lo mejor de todo», comenta efusivamente Mikel, uno de los irundarras. Aunque esta actividad está en el primer puesto del podio de los chavales, los combates de 'laser tag' y conducir un segway por las pistas ocupan la segunda y tercera posición, respectivamente.

Todos ellos están maravillados, no solo con la experiencia, sino también con los monitores que cada día los acompañan. «Son todos súper majos», asegura Ander, a lo que Oier añade, con una sonrisa, que «¡Xabi es el mejor!». La única pega que le ponen a la colonia es la comida, «es lo que menos me gusta y se podría mejorar», confiesa Aimar, aunque rápidamente se apresura a recalcar que los desayunos «están muy ricos porque nos dan sobaos, cereales, Nesquik...».

Los encargados de lidiar con estos niños (y los que vendrán) son sus monitores. «Es un grupo muy majo», dice Ainara, mientras Xabi destaca que «a todos les gusta participar en los juegos». Entre los chavales y sus monitores hay un pique sano en el que los primeros les toman el pelo y los segundos «les gastamos bromas». Eso sí, algo que ha «sorprendido» gratamente a Xabi es que «todos comen fruta, me esperaba que comieran menos».

Aunque el parque cuenta con unas fuentes para que los jóvenes se refresquen, «con cada grupo hacemos una excursión al embalse deLeurtza los domingos», explica Giralde, una salida con la que también 'combaten' la gran afluencia de visitantes con los que cuentan los fines de semana. Sea en el embalse, a los mandos de un segway o lanzándose en tirolina, a los jóvenes irundarras no se les borra la sonrisa de satisfacción de la cara.