21 febrero 201708:05
El Pleno de la Corporación está citado mañana para la sesión ordinaria del mes de febrero en la que, entre otras cuestiones, se debatirá y votará una nueva ordenanza para regular las viviendas tasadas municipales. Se trata de una figura de vivienda protegida a la que diversas promociones residenciales en la ciudad, públicas y privadas, se han acogido en los últimos años. Sin embargo, según explicaba el delegado de Urbanismo y Vivienda, Xabier Iridoy, la versión vigente necesita de una actualización. «Hay que adaptarla a la realidad legal de la nueva Ley Vasca del Suelo, que se aprobó en 2015, y a los profundo cambios que la crisis ha provocado en todo lo que tiene que ver con la vivienda. La Vivienda Tasada Municipal (VTM), tal como está regulada ahora, se ha quedado fuera del mercado».
LAS CLAVES
Precios máximos. Las Viviendas Tasadas Municipales no valdrán por metro cuadrado más que el precio de VPO multiplicado por 1,7, aunque sí puede ser menos. En alquiler, nunca más de un 3% del valor de venta, con un tope máximo de 623 euros mensuales.
Condiciones. Los ingresos anuales mínimos y máximos se modifican para dejarlos en 12.000 y 45.500, rspectivamente. Se requiere un año o más de empadronamiento aunque si la oferta supera a la demanda se admitirán incluso empadronados en la comarca o en Donostialdea.
Sin sorteos. La adjudicación se realizará por baremación en función de la renta y del número de miembros de la unidad convivencial.
Tanto es así que la última promoción privada que ha optado por la fórmula de las tasadas, la que está a punto de arrancar en el Alto de Arretxe, ha elegido las tasadas autonómicas, «que sí que están actualizadas, porque las municipales no resultan interesantes». Es importante que vuelvan a serlo, dado que las primeras no priorizan a los vecinos de Irun frente a otros ciudadanos vascos.
Nuevos criterios
Los cambios en la ordenanza que el Gobierno presentará hoy ante la Corporación afectan a diversos aspectos. El más llamativo quizá sea que la adjudicación de las VTM no volverá a hacerse por sorteo, «sino por baremación», señaló Iridoy. Se tendrán en cuenta tanto el número de miembros como los ingresos de la unidad convivencial. En cuanto a estos últimos últimos, la variación en lo que se admite para poder optar a una VTM es significativa, especialmente en los mínimos, que bajan de 25.000 euros anuales a 12.000.
Otro aspecto fundamental de las tasadas municipales que regula la ordenanza es su precio. Se toma como referencia el valor de metro cuadrado de VPO (1.629 euros en Irun) y multiplicando por 1,7 se establece un precio máximo de 2.769 euros por metro cuadrado. «Un máximo aún por encima de precios de mercado libre, por lo que esperamos precios de venta más bajos». El alquiler será, también como máximo, de un 3% del precio de venta, «nunca mayor que 623 euros al mes, aunque sí podría ser menor».
El delegado de Vivienda, Xabier Iridoy, explicó las características de las nuevas viviendas tasadas municipales.