12 diciembre 201400:12
Una mezcla de «antigüedades, objetos valiosos y otros muy curiosos» componen la oferta de la subasta de Emaús. Hasta el 20 de diciembre, los interesados en participar en esta iniciativa solidaria pueden hacerlo en el Ekocenter del Alto de Arretxe, situado en la calle Auzolan, donde se exhiben los más de setenta artículos que componen la oferta.
LOS DATOS
Cómo participar. Los interesados en hacer una puja deben acudir a las instalaciones del Ekocenter de Emaús, en el Alto de Arretxe, seleccionar el objeto que quieran conseguir y rellenar un formulario. También deberán abonar, a modo de fianza, el 10% del precio de salida del artículo en cuestión. En caso de que finalmente no lo consigan, se les devolverá la fianza.
Plazo. Se admiten pujas hasta el 20 de diciembre. El resultado de la subasta se dará a conocer el día 24.
Catálogo completo. Los objetos incluidos en la subasta y las bases de la misma pueden consultarse en la web www.emaus.com.
Es el cuarto año que se organiza la subasta en Irun, y la primera vez que tendrá lugar en los centros de Emaús de Amara y Arrasate. La iniciativa «suele tener buena acogida» en nuestra localidad, según explica Ana, trabajadora de Emaús. Además del valor solidario de la iniciativa, los artículos de la subasta ofrecen la oportunidad de hacerse con un regalo navideño diferente.
La mecánica de la iniciativa es muy sencilla: cada artículo cuenta con un precio de salida, y los interesados deben pujar por la cantidad superior que consideren. Al hacerlo, se debe depositar una fianza que asciende al 10% del precio de salida del objeto en cuestión. Por ejemplo, si éste está valorado en 20 euros, se deberán dejar 2 euros de fianza. Si su puja es la más alta de cuantas reciba ese objeto, podrá adquirirlo a partir del 24 de diciembre, fecha en la que se dará a conocer el resultado de la subasta solidaria. Las personas que no consigan el objeto por el que pujaron podrán recuperar la fianza depositada previamente.
Viaje por el túnel del tiempo
La 'joya de la corona' de este año es una argizaiola del siglo XVII. Conocidas en castellano como 'cerilleros de difuntos', estas piezas consistentes en una vela enroscada a una estructura de madera tienen un gran arraigo en el País Vasco. La que se exhibe en Emaús es de madera de nogal «y nos la trajo un particular directamente. No es decorativa sino real, lo que le da un valor añadido». El precio de salida del artículo estrella de la subasta asciende a 200 euros. Sin embargo, la argizaiola no es el objeto más caro: el récord de este año lo tiene una antigua moto Velosolex de los años 50, cuyo precio de salida está fijado en 275 euros.
De una fecha muy significativa del pasado siglo llegan también varios ejemplares de periódicos: son del 20 de noviembre de 1975 y los días posteriores, cuando los titulares de prensa dejaron esa frase que ha pasado a la historia: 'Franco ha muerto'.
El viaje por el túnel del tiempo que ofrece la subasta de Emaús incluye también reliquias como una radio antigua de gran tamaño, una terminal bancaria, planchas de hierro, máquinas de coser, un proyector de cine super 8, un magnetófono... Y un par de tesoros que tentarán especialmente a los aficionados a la fotografía, como una Polaroid instantánea de los 80 o un fotómetro antiguo.
De media, el precio de la gran mayoría de los artículos expuestos en la subasta oscila entre los 20 y los 40 euros. El catálogo completo puede consultarse en la página web de Emaús. La mayoría de los objetos incluidos en la subasta «están rescatados de entre los artículos que vamos recogiendo durante todo el año. Cuando nos llega alguno curioso o que nos parece especial, solemos reservarlo para esta ocasión», explica Ana. La trabajadora de Emaús señala que entre los que suelen participar en esta subasta «hay muchos que vienen desde Francia, anticuarios... Y también curiosos que quieren hacerse con un objeto especial».
Organizar esta subasta solidaria «lleva mucho trabajo. Son objetos delicados, que hay que cuidar mucho». No obstante, el esfuerzo merece la pena porque la iniciativa «tiene buena acogida todos los años». Hasta el próximo 20 de diciembre, el plazo para pujar por una de estas reliquias continuará abierto.