Para Millán el 2011 ha sido un año negativo

El paro, la subida de los impuestos y el conflicto laboral de los trabajadores de la OTA, son para el concejal el lastre que la ciudad ha tenido que soportar el pasado año

Manuel Millán, portavoz del EB-B en el Ayuntamiento de Irun, ha repasado los diferentes acontecimientos que a su parecer, han marcado la vida política, social y económica de la ciudad durante el año que acaba de finalizar.

Para el edil, uno de los peores problemas que ha sufrido la ciudad durante el 2011, ha sido el paro, hecho que ha motivado que para el concejal el pasado año haya sido “un mal año para la ciudad”. Además Millán se muestra más indignado cuando explica que frente a la situación de la tasa de desempleo “no ha habido medidas serias que permitan invertir la tendencia”, mencionando que la labor de Bidasoa Activa es muy ineficiente “por culpa del limitado presupuesto”. Continuando con la situación económica, el edil asegura que el consistorio tiene problemas de financiación “como consecuencia del sometimiento de la economía a los sectores financieros”. Además, acusa al gobierno municipal de la subida en impuestos y tasas, “pretendiendo aplicar subidas muy por encima del IPC como en polideportivos”.

Para el concejal otro problema más que añadir a la lista, es el parking de San Juan, que califica como “la obra más cuantiosa de los últimos años” y que teme que no se recupere la inversión, debido a que hasta la fecha “hay una reducida adquisición de plazas de residentes, además de por que tardará la empresa gestora del parking en pagar el canon correspondiente al ayuntamiento”.

OTA e Iparralde Gal

Respecto a lo social, Millán cree que la sensibilidad del ayuntamiento hacía los problemas de los trabajadores ha quedado patente “cuando tras tres despidos de los trabajadores de la OTA y seis meses de huelga por parte de los trabajadores, el alcalde no dudó en premiar a la empresa gestora con un año más de prórroga en el contrato”.

Y finalmente el portavoz de EB-B destacó entre su repaso de acontecimientos, el pleno celebrado en noviembre en el que según él “la empresa Brues, encontró parte de la solución a su quiebra gracias a la decisión de la Corporación de aprobar definitivamente la modificación y recalificación urbanística de la zona de Iparralde-Gal”.