6 junio 201500:12
El medio ambiente invita a pensar en naturaleza y espacios verdes. Pero también es un concepto que se aplica 'a pie de calle', en nuestra ciudad, sus plazas y parques. Con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, celebrado ayer, Servicios de Txingudi quiso reforzar esta idea acercando a un grupo de escolares a las tareas de limpieza viaria.
Los integrantes de este servicio de la Mancomunidad se encontraron ayer con alumnos de San Vicente de Paúl en el parque de El Pinar, cuya Asociación de Vecinos también se sumó al acto. «Se trata de concienciar a la gente, no sólo del barrio sino de todo Irun, de que también a nosotros nos compete mantener las calles limpias», señaló Agapito Carballo, presidente de la AVV.
En la sesión se habló no sólo de la limpieza de las calles, sino también del mobiliario público. Los jóvenes observaron con atención cómo un operario utilizaba una pistola de agua para limpiar los juegos infantiles de El Pinar.Los trabajadores de Servicios de Txingudi y la educadora medioambiental Alaitz Egiazabal ofrecieron a los escolares una clase teórica y práctica sobre cómo se mantiene limpia nuestra ciudad. Desde los escobones hasta las máquinas barredoras, pasando por los sopladores, los jóvenes conocieron las herramientas que mantienen limpias las calles. «Todo esto, como imaginais, conlleva un gasto. ¿Os imaginais cuánto al año?», les preguntó Alaitz Egiazabal. Los jóvenes apuntaron que «seguro que mucho», respuesta que fue confirmada por la educadora: «unos cuatro millones de euros al año. A pesar de que ellos limpian las calles, nosotros también tenemos unas responsabilidades». Aprender a valorar el trabajo que se realiza en esta materia es el primer paso para cumplir con esos deberes cívicos.
Y seguro que estos alumnos de San Vicente de Paúl se lo pensarán antes de 'firmar' en un banco u otro elemento del mobiliario urbano: «utilizamos productos, que son muy fuertes, para eliminar estas pintadas», les explicó uno de los operarios frente a una mesa de ping pong 'decorada' por algún artista anónimo.
«El medio ambiente también es lo que nos rodea dentro de la ciudad. Hemos querido dar la importancia que se merece a la limpieza viaria», explicó Alaitz Egiazabal. Con la actividad de ayer, se pretendía que los escolares «sean conscientes de que, junto con el trabajo que realiza el servicio de limpieza viaria, nosotros también podemos contribuir a mantener limpia la ciudad: echando la basura a la papelera, recogiendo los excrementos de los perros, no dejando nuestro nombre por todas partes...». A tenor del entusiasmo que mostraron al final de la sesión, ayudando a los operarios con sus tareas, la lección quedó bien aprendida.
Escolares observan cómo un operario de Servicios de Txingudi limpia el área infantil de El Pinar.
/ F. DE LA HERA
