En el reparto de las áreas, Santano optó por distribuir todas las carteras en cuatro concejales delegados, a la espera de un gobierno de coalición que no termina de llegar. En esa estructura, Cristina Laborda gestiona hasta la fecha delegada ocho áreas.

Nacida en Donostia en 1980 y licenciada en Historia (2003) y en Humanidades y Empresa (2006, con premio fin de carrera al mejor expediente académico) por la Universidad de Deusto, esta irundarra procede de una familia de larga tradición socialista. Su padre, el hondarribiarra Ramón Laborda, fue concejal durante 17 años en la ciudad costera, mientras que su madre, Juani Albolea, forma parte del Comité Local que preside Santano como secretario general de la agrupación.

Cristina Laborda ha desarrollado desde 1999 una carrera política en la que, además de ser juntera y parlamentaria, dentro de la Junta Local de Gobierno ha adoptado materias con cada vez mayor peso en la gestión municipal.

Al frente de Juventud entre 1999 y 2003, cuando debutó como concejala con 19 años a las órdenes del entonces alcalde, Alberto Buen, en 2003 sumó a sus competencias Cooperación. A partir de 2007, lideró el Área de Bienestar Social, Educación y Juventud.

Representante del PSE en las Juntas Generales de Gipuzkoa entre junio de 2007 y marzo de 2008, ese mismo año dio el salto al Parlamento Vasco, donde fue parlamentaria durante el Gobierno de Patxi López, hasta 2012. En ese periodo, tras las elecciones municipales de 2011, Laborda fue designada para una de las carteras relevantes en un ayuntamiento, la de Movilidad, Vía Pública y Obras; que en 2015 cambió por Movilidad, Vía Pública y Obras.

Cuando el gobierno de coalición con el PNV se quebró en 2018, Laborda sumó a sus desempeños Policía Local y Convivencia. En el último mandato ha gestionado Recursos Humanos y Servicios Generales; de Obras Públicas; y la de Policía Local y Convivencia.

Segunda teniente de alcalde, desde junio está al frente de todas las áreas que en los distintos momentos de su trayectoria política municipal ha llevado, como son Bienestar Social; Recursos Humanos y Servicios Generales; Obras Públicas; Policía Local y Convivencia; Valores y Derechos Humanos; Cooperación al Desarrollo; Igualdad y Consumo.

Retos sobre la mesa

Este escenario, en el que cuatro ediles llevan delegadas todas las áreas, será uno de los primeros que deberá afrontar Cristina Laborda en los primeros días como alcaldesa. Tras configurar su primera Junta de Gobierno Local, que deberá rehacer repartiendo parte de las múltiples carteras que ha gestionado desde junio, intentará rematar las conversaciones abiertas para cerrar un gobierno de coalición que dé estabilidad al Ayuntamiento. Con 10 concejales de 25, el PSE busca el apoyo de al menos tres ediles, cifra que alcanzaría con el PNV (7 escaños) o EH Bildu (4).

En materia de infraestructuras, Laborda encontrará dos grandes retos como son el de Via Irun, con las obras de la nueva estación de Adif que costará 65 millones de euros recién comenzadas, y la construcción del nuevo pabellón de Ficoba, para el que los proyectos de presupuestos de Irun y Gipuzkoa ya consignan partidas económicas; además de tener que rematar la ampliación de la céntrica biblioteca CBA y el edificio municipal en la plaza San Juan; la extensión del polideportivo de Azken Portu y el traslado de las pistas de atletismo y rugby de Plaiaundi a Txenperenea, y el desarrollo del ámbito residencial de San Miguel-Anaka, sin olvidar el encaje de las nuevas instalaciones de Salud, motivo de enfrentamiento entre el Ayuntamiento y el Gobierno Vasco.

La seguridad ciudadana también será una de las cuestiones que deberá cuidar el nuevo gobierno local en una ciudad que por su carácter fronterizo presenta una casuística propia, mientras que en materia de igualdad, el futuro del alarde seguirá sobre la mesa.

Edil desde 1999 y actual segunda teniente de alcalde, Laborda, nacida en Donostia en 1980, figuró como segunda de la lista del PSE en las elecciones municipales de mayo. Según ha publicado eldiario.es, se convertirá en la primera alcaldesa de la ciudad, cumpliendo los pronósticos que ya se habían anunciado cuando se conoció la salida de Santano.

Laborda accedió a la Corporación municipal con Alberto Buen como alcalde, en 1999, en un Gobierno municipal en el que fue delegada de Juventud mientras José Antonio Santano era primer teniente de alcalde. Parlamentaria en Vitoria entre 2008 y 2012, y juntera en Miramon un año antes de esa etapa, ha compaginado sus cargos públicos (incluida la Comisión Ejecutiva del PSE de Gipuzkoa) con una presencia municipal cada vez más cualitativa.

¿Quién es Cristina Laborda?

Tras liderar Juventud, entre 2003 y 2007 también gestionó Cooperación, mientras que tras la segunda victoria de Santano en las urnas lideró el Área de Bienestar Social, Educación y Juventud. En 2011 pasó a una de las carteras relevantes en un ayuntamiento, como es la de Movilidad, Vía Pública y Obras.

Segunda teniente de alcalde, desde junio y a falta de un acuerdo de coalición que reparta las carteras entre más ediles, Laborda dirige Bienestar Social; Recursos Humanos y Servicios Generales; Obras Públicas; Policía Local y Convivencia; Valores y Derechos Humanos; Cooperación al Desarrollo; Igualdad y Consumo.

Este relevo, que tendrá consecuencias directas en el reparto de las delegaciones en la Junta de Gobierno, empezará a tomar forma este mismo lunes, cuando según anunció el aún primer edil este mismo domingo a los portavoces, convocará un pleno para las 17:30 horas en el que habrá un único punto con su renuncia antes de que este mismo martes el Consejo de Ministros lo designe secretario de Estado.

Dado que el nombramiento de Laborda no se tratará este lunes, la Corporación tendrá 10 días hábiles de plazo para designar a la sucesora de Santano. En este periodo, al frente del Ayuntamiento se situaría la figura del alcalde accidental, el primer teniente de alcalde, responsabilidad que en este caso le correspondería a Miguel Ángel Páez.

Así lo ha comunicado a los portavoces municipales este domingo el propio Santano, que se ha dejado ver en el Stadium Gal, como acostumbra en los partidos del Real Unión. Como en muchas ocasiones, ha acudido junto a Miguel Ángel Páez, uno de los dos nombres que más suena como posible sucesor.

Una clave de la convocatoria del pleno residirá en si incluye la elección de la persona que relevará a Santano. En caso negativo, la sesión plenaria servirá para que la Corporación ratifique la salida del alcalde y lo despida. Sin elección inmediata, la Corporación tiene 10 días hábiles para elegir a un nuevo alcalde o alcaldesa según la legislación vigente.

Sea la elección este mismo lunes o se demore a un pleno próximo, dos son los nombres que encabezan las quinielas desde el viernes: la número 2 de la lista del PSE en mayo, Cristina Laborda, y el actual primer teniente de alcalde, Miguel Ángel Páez. A estas alturas tampoco se pueden descartar sorpresas en forma de otros candidatos e incluso entre los dos principales aspirantes. Si este lunes no hubiera elección, será Páez quien en su condición de primer teniente de alcalde se convertirá en alcalde accidental, figura recogida en la legislación para estas casuísticas.

Él es junto a Laborda, Borja Olazabal y Nuria Alzaga uno de los cuatro ediles que es delegado de área tras un reparto de carteras que el PSE confiaba en junio en rehacer en pocas semanas, tras cerrar un acuerdo de gobierno que aún no ha llegado.

Apenas medio año después, Santano se marcha y como suelen ser estos cambios, el escenario se precipitó en cuestión de horas. Fue a última hora del miércoles, cuando tras el acto público de presentación de la Copa de España de balonmano, Santano recibió la propuesta, que debía responder en pocos días según fuentes municipales. El viernes por la tarde el todavía presidente de la Corporación irundarra aceptaba ser el segundo de a bordo del Ministerio que lidera Óscar Puente. El rumor corrió rápido por la ciudad.

Esta salida 21 años después de su primera elección en septiembre de 2002 supone el adiós del alcalde irundarra más longevo desde la restauración democrática (su predecesor, Alberto Buen, gobernó durante 19 años), y también el que más tiempo llevaba entre las localidades más pobladas de Gipuzkoa.

Con el adiós de Santano de la Corporación, correspondería al siguiente en la lista del PSE ocupar el acta de concejal. En este caso, quien concurrió en undécima posición en las elecciones de mayo fue Sergio Corchón, que en anteriores mandatos ha sido edil delegado a cargo del área de Bienestar Social. Tomaría posesión de su acta en el siguiente pleno.

Laborda fue la número 2 de la lista en las municipales de mayo, mientras que en la estructura del Consistorio es Páez quien ejerce de primer teniente de alcalde. Ambos cuentan con una amplia trayectoria política en el edificio señorial de la plaza de San Juan y la designación de cualquiera de los dos no podría calificarse como sorpresa.

José Antonio Santano, adiós a 21 años como alcalde de Irun

Cristina Laborda, nacida en 1980, accedió a la Corporación municipal con Alberto Buen como alcalde, en 1999, en un Gobierno municipal en el que fue delegada de Juventud mientras José Antonio Santano era primer teniente de alcalde. Parlamentaria en Vitoria entre 2008 y 2012, y juntera en Miramon un año antes de esa etapa, ha compaginado sus cargos públicos (incluida la Comisión Ejecutiva del PSE de Gipuzkoa) con una presencia municipal cada vez más cualitativa.

Tras liderar Juventud, entre 2003 y 2007 también gestionó Cooperación, mientras que tras la segunda victoria de Santano en las urnas lideró el Área de Bienestar Social, Educación y Juventud. En 2011 pasó a una de las carteras relevantes en un ayuntamiento, como es la de Movilidad, Vía Pública y Obras; que en 2015 cambió por Movilidad, Vía Pública y Obras, a las que sumó Policía Local y Convivencia tras la ruptura de la coalición con el PNV. En el último mandato le ha tocado lidiar con las áreas de Recursos Humanos y Servicios Generales; la de Obras Públicas; y la de Policía Local y Convivencia.

Segunda teniente de alcalde, desde junio y a falta de un acuerdo de coalición que reparta las carteras, dirige Bienestar Social; Recursos Humanos y Servicios Generales; Obras Públicas; Policía Local y Convivencia; Valores y Derechos Humanos; Cooperación al Desarrollo; Igualdad y Consumo.

Cuatro años más que Laborda lleva Miguel Ángel Páez en la Corporación y también en la Junta de Gobierno Local. Irunés de de 56 años, es graduado en Derecho y debutó en el Ayuntamiento como concejal en 1991 y como delegado de Deportes y Juventud en 1995, cartera esta segunda que cedería a Laborda cuatro años después. En el mandato de 1999 pasó a gestionar Obras, primero con Alberto Buen y después ya con José Antonio Santano como alcalde.

Desde entonces ha presidido áreas claves en la gestión municipal, como son Hacienda, Desarrollo Económico y Vivienda (de 2003 a 2007); Vivienda y Obras desde 2007, año en el que tomó la portavocía del grupo municipal del PSE; Urbanismo, Hacienda, Medio Ambiente, Promoción Económica y Plan Estratégico (2011-2015); y Economía y Hacienda y de Desarrollo Urbano (2015-2019). Actual primer teniente de alcalde, mantiene en su macroárea buena parte de las materias gestionadas hasta la fecha, más otras pendientes de un nuevo reparto de responsabilidades: Economía y Hacienda; Disciplina Urbanística y Vivienda; Organización, Administración Digital y Equipamientos; Desarrollo Urbano; e Impulso de Ciudad.

Reelegido en junio, Santano optó por no repartir las áreas entre más concejales y hacerlo solo entre cuatro, lo que hacía presumir que en verano habría una entente con otro partido y que el Gobierno local tuviera la forma definitiva. No ha sido así y casi medio año después, además del primer edil, Laborda y Páez, otros dos concejales asumen las tareas ejecutivas.

Olazabal y Alzaga

Los otros dos concejales que gestionan delegaciones de área, Borja Olazabal y Nuria Alzaga, cuentan con menor experiencia política en comparación con Páez y Laborda. Borja Olazabal (Irun, 1984) accedió a la Corporación en las elecciones de 2019 como independiente. Actor entre 2004 y 2006 mientras estudiaba la carrera, ha ejercido de periodista entre 2006 y los comicios municipales de hace cuatro años, según el currículum vítae público en la web municipal.

Ya en la Junta de Gobierno Local fue delegado de Deportes y de Desarrollo Sostenible y Movilidad, a los que sumó Cultura en el último tramo del mandato. Cuarto en la lista del PSE en las elecciones municipales, Olazabal es concejal delegado de Vía Pública, de Deportes, y de Desarrollo Sostenible y Movilidad, además de cuarto teniente de alcalde.

Por su parte, la tercera teniente de alcalde y tercera en la lista de mayo, Nuria Alzaga, se ha incorporado a las listas del PSE este mismo 2023. Nacida en Irun en 1990, es licenciada en ADE y obtuvo después un grado superior en Administración y Finanzas, además de un grado medio musical. Vinculada con las artes según recoge la documentación disponible en la web municipal, era la presidenta de la Banda de Música Ciudad de Irun desde el año 2015 y tras las elecciones es delegada de una superárea conformada por Cultura; Atención Ciudadana, Participación y Barrios; Euskera; y Educación y Juventud.