EN tiempos de crisis y de recortes presupuestarios toca agudizar el ingenio. Es lo que pretenden hacer en el barrio irunés de Santiago, con el llamado Proyecto Artefakto.
"El objetivo es que los vecinos propongan un espacio público del barrio en el que se pueda hacer un pequeño proyecto arquitectónico, de los que no requieren de licencias y permisos urbanísticios, una actuación con materiales reciclados que recupere ese espacio para uso y disfrute de los ciudadanos", explicaba este martes el arquitecto Josu Laguardia, quien forma parte, junto con Estitxu Ortolaiz (fotógrafa), Arantxa y Carlos Etxebeste (diseñadores gráficos) y Julio Iturri (programador informático y webmaster), del grupo que impulsa esta iniciativa.
"Todos ellos son vecinos del barrio o están relacionados con Santiago, y la idea de hacer algo en la calle a partir de las propuestas de los vecinos, para que luego ellos mismos también lo construyan, nos pareció muy atractiva", explicaba Gabriel Fojón, de la Asociación de Vecinos de Santiago.
HASTA SEPTIEMBRE
Calendario en marcha
El calendario para que Santiago tenga su Artefakto ya está en marcha. "Hasta el 8 de junio, los vecinos pueden hacer llegar sus propuestas y apuntarse para trabajar en su futura construcción", explicó el diseñador Carlos Etxebeste.
El 9 de junio se colgarán en la web www.proyectoartefakto.com todas las ideas y se elegirán diez por votación hasta el día 14 de junio.
El 15 de junio se publicará un pliego de condiciones para que arquitectos, estudiantes y alumnos de la escuela de diseño Kunsthal puedan diseñar sus proyectos, durante un mes. Del 16 al 20 de julio se hará una exposición de los proyectos y el jurado hará público el ganador el 25 de julio. Finalmente, el Artefakto de Santiago se construirá en septiembre, con materiales reciclables suministrados por Servicios de Txingudi
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