A lo largo de 16 ediciones, el Ficab ha visitado decenas de países y ha trasladado a sus espectadores a prácticamente todas las etapas de la historia de la Humanidad, incluso a algunas previas.

Aún y con todo ese bagaje, el festival de cine arqueológico sigue teniendo la capacidad de sorprender: sigue habiendo rincones del planeta por visitar, historias que nunca se habían contado y descubrimientos que amplían o incluso cambian nuestra forma de entender el pasado. «Las corrientes de las investigaciones arqueológicas tienen un reflejo en la temática de las películas que llegan al festival», afirma la directora del mismo. En el programa de este año, Noain destaca algunas tendencias muy marcadas y que derivan, precisamente, de líneas de investigación muy en boga.

«Hay varios documentales que tratan de los orígenes del arte y del pensamiento simbólico, del paleólitico y de la convivencia entre neandertales y sapiens», cuestión esta última que está dando que hablar en los círculos investigadores. Otro frente son China y Mongolia. «Vamos a ver tres grandes producciones sobre estos temas y es curioso», señala Noain, «que pese a que son trabajos de productoras diferentes, incluso de países distintos, en algunos casos vamos a ver a los mismos arqueólogos participando porque se trata de las personas que están realizando las investigaciones más relevantes sobre este tema».

También la actualidad marca una pauta. Así, en este Ficab se va exhibir, precisamente mañana, una producción española que documenta las investigaciones realizadas en 2015 para tratar de encontrar los restos de Miguel de Cervantes, encarnado en esta cinta por el actor Ramón Barea. El director Javier Balaguer firma este documental con el objetivo de «entretener, documentar un proceso histórico y permitir que cada cual saque sus conclusiones» sobre las condiciones en las que tuvieron que trabajar expertos como Paco Etxeberria.

Contar en la ciudad con el único festival de cine arqueológico que hay en España es un lujo en sí mismo. Hay que buscar, por tanto, otra expresión para calificar lo que supone que una misma edición de ese certamen, la de este año, cuente con la presencia de uno de los tres arqueólogos que comparten la dirección del aparentemente inagotable yacimiento de Atapuerca, Eudald Carbonell, y con la de Pilar Fatás, la directora del Museo de Altamira y del centro asociado a él para la investigación de esta cueva cántabra cuyo arte rupestre lleva más de un siglo siendo estudiado por paleontólogos de todo el mundo.

Efectivamente, ambas personalidades están en el programa del Ficab de este año. Ella como presidenta de un jurado excepcional que tiene la responsabilidad habitual de elegir quién ganará el Gran Premio del festival; él como participante en dos coloquios. Carbonell coprotagoniza el documental incluido en la Sección Educativa 'En busca del futuro perdido', que podrá verse el martes a las 11.00 horas en el Amaia y el miércoles a la misma hora en la sede de la Fundación Orona, en Hernani. Junto al director de la película, Alfonso Par, y la hija de éste y coprotagonista de la misma, Carlota Par, el arqueólogo intervendrá antes y después de cada uno de los pases.

La oportunidad de traer a este trío no se podía desaprovechar. «Como además era una película que iba a tener un pase doble, en el Amaia y en Orona, nos pareció muy interesante contar con alguien del equipo para que la presentara y participara en un coloquio», explica la directora del Ficab, María José Noain. «Contactamos con Alfonso Par y a través de él pudimos conseguir que vinieran también los protagonistas, Carlota y Eudald Carbonell».

Aunque éste último pueda ser conocido por su labor en Atapuerca, esta cinta nada tiene que ver con el yacimiento burgalés. En resumen, lo que propone 'En busca del futuro perdido' es un viaje por el mundo actual en busca de sociedades aún existentes que permiten establecer paralelismos con las primeras edades del hombre. «La idea es que entre Alfonso Par, Carlota Par y Eudald Carbonell presenten la película antes de su proyección para aportar algunas claves que tener en cuenta al verla y participen después en un coloquio con los asistentes», detalla Noain, que destaca la figura de Carbonell «por ser un investigador de reconocido prestigio internacional y, al mismo tiempo, un gran comunicador, cualidades que no siempre coinciden en la misma persona».

Topdo esto ocurrirá el martes por la mañana en Irun y el miércoles por la mañana en Orona, pero el festival arranca mañana con una gala de apertura que refleja varias de las novedades de esta edición del Ficab.

Por primera vez, María José Noain participará en este acto como directora del festival y, también por vez primera, no estará el catedrático Juan Santos Yanguas como presidente del jurado, cargo que hasta ahora siempre había ostentado y que ya el pasado año anunció que había llegado el momento de dejar. El puesto será rotatorio desde ahora y, para este primer año sin Santos Yanguas, el Ficab ha encontrado una figura de renombre como la de la directora del Museo y el Centro de Investigación de Altamira, Pilar Fatás.