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Nunca antes un Campeonato del Mundo de aguas bravas se había celebrado tan cerca de Irun y por ello la sede de Pau recibió a mucha gente de la sección de aguas bravas de Santiagotarrak y a familiares y amigos de Ander Elosegi, Joan Crespo y Klara Olazabal en slalom y Paula Grijalba en descenso. También destacable la presencia de entrenadores de Santiagotarrak en la selección, con Xabi Taberna a la cabeza, Ander Díez e Iñaki Gómez.

Era curioso, al moverse por la instalación mundialista, cruzarse con conocidos y poder charlar sobre el acontecimiento. Todos los que se desplazaron hasta Pau disfrutaron con un gran evento y un ambiente sensacional, pero no pudieron añadirle alegrías deportivas.

El mejor de los tres irundarras en slalom fue Ander Elosegi, quien en la clasificatoria de C-1 fue el segundo más rápido pero al final quinto por culpa de un toque. El irundarra había llegado en un buen momento al Mundial pero el gran nivel existente casi le dejó fuera de la final. A solo 2.10 del primero de la semifinal, fue el último en clasificarse.

Una vez en la final, el tres veces olímpico salió a por todas, con la mala suerte de que tocó la cuarta puerta del recorrido. Por culpa de esos dos segundos de penalización se vio retrasado a una agridulce octava posición. Es la cuarta vez que acaba un Mundial entre los diez primeros y su segundo mejor resultado.

Por su parte Joan Crespo venía de conseguir muy buenos resultados esta temporada (dos veces quinto y una sexto en pruebas de la Copa del Mundo) y lo confirmó con el sexto puesto de la clasificatoria de K-1. En la semifinal en cambio se vio relegado a la posición 38.

Por último, Klara Olazabal también acudió con buenas credenciales (quinta y sexta en pruebas de Copa del Mundo) y se plantó con 19 años recién cumplidos en el Mundial. Le faltó una pizca de suerte, pues en la clasificatoria de C-1 se quedó a tres puestos y cuatro segundos de poder clasificarse para la semifinal y en la repesca a solo dos puestos y a un segundo de entrar.

Además de la modalidad de slalom, en Pau se celebró igualmente el Mundial de descenso, para el que se había clasificado Paula Grijalba. La representante de Santiagotarrak quedó apeada en la clasificatoria, al ocupar el puesto 34.

«Disfrutar del tiempo de ocio en familia, al aire libre y con actividades culturales». Ese fue el propósito del que partió, hace tres años, la iniciativa Gira Bira, impulsada por los colectivos Txikis del Bidasoa y Ezmugak y por el Ayuntamiento de Irun. Desde entonces, Gira Bira ha recorrido los parques de la ciudad con diferentes propuestas temáticas como el cine, el circo, el teatro o la música. La iniciativa se ha colado en la agenda de pequeños y mayores y son ya cientos de familias bidasoarras las que acuden a esta exitosa cita lúdica y cultural.

Ayer, y con la música como hilo conductor, se celebró en el parque Mendibil la última Gira Bira de 2017. Actuaron los grupos Howdy y Anita y los peleles, que ofrecieron sendos conciertos, especialmente pensados para toda la familia. Por la tarde, Skola Musik, Kuttuna y Hendaia Lanetik ofrecieron talleres con diferentes instrumentos musicales.

«Estamos muy contentos con los resultados de este año», comentaba Ainara Rubio, de Txikis del Bidasoa. «Aunque tuvimos que aplazar la jornada del teatro y trasladar al Amaia la del cine por mal tiempo, el balance de Gira Bira es muy bueno, porque la acogida del público ha sido espectacular. Programar al aire libre aquí es complicado. Entre actuaciones y talleres, interviene mucha gente y a veces hay que reorganizarlo todo para otra fecha, pero el esfuerzo ha merecido la pena».