HACE ya casi dos años que se implantó en las principales arterias viales de Irun, como el paseo Colón, la calle Hondarribia y las avenidas de Navarra y Gipuzkoa, además de varias calles adyacentes a todas ellas; la obligatoriedad de circular a un máximo de 30 kilómetros por hora. Una medida que buscó la convivencia de vehículos a motor y bicis en la calzada y que ha supuesto un calmado notable del tráfico, aunque no exento de peligro todavía, si preguntamos al menos a los ciclistas.
El pasado 8 de febrero, el Gobierno municipal anunció que a partir de este verano, la medida de circular a 30 por hora "o incluso menos en algunas calles concretas", pasaría a ser "la norma en Irun, y no la excepción", convirtiendo así a la localidad en "una ciudad 30, siguiendo el modelo de movilidad urbana que impera en buena parte de Europa".
DETALLES EN LA MESA DE MOVILIDAD
De forma gradual
La pasada semana se reunió la Mesa de Movilidad de Irun, integrada por representantes políticos, técnicos y agentes del tejido social, vecinal y económico de la ciudad. Allí, se dieron detalles de la puesta en marcha de esta medida, que se hará "de forma gradual y similar a la de la zonas implantadas hace dos años", según explicó ayer a este periódico Cristina Laborda, la edil delegada de Movilidad.
"En los últimos meses y también a lo largo de las próximas semanas se está preparando toda la señalización de las zonas 30, que ahora mismo está tapada, pero que a partir de julio, después de fiestas, se destapará para poner la medida en marcha", detalló Laborda.
Al igual que ocurrió hace dos años, "habrá una potente campaña de información y sensibilización hacia los ciudadanos, para que se familiaricen con las nuevas zonas y empiecen a circular a las nuevas velocidades, pero en una primera etapa, como ocurrió entonces, no habrá multas económicas", explica la edil de Movilidad de Irun.
Las sanciones y la obligatoriedad ya rigurosa de cumplir con la nueva norma de velocidad llegarán "pasados unos primeros meses de prueba, hacia finales de año aproximadamente", según detallaba ayer Cristina Laborda.
Estas explicaciones de la edil de Movilidad contrastan, radicalmente, con las impresiones de Txomin Balerdi, de Kalapie Bidasoaldea. El portavoz del colectivo ciclista señala que están "hartos de engaños por parte del gobierno de Irun", que "anuncia medidas y luego, o las dilata muchísimo en el tiempo o directamente no las cumple, con la aquiescencia de los grupos de la oposición, que ni dicen ni hacen nada ante todo esto".
Según Txomin Balerdi, "la Mesa de Movilidad es un auténtico paripé en el que, tras cuatro años de trabajo en el Plan de Movilidad, se han puesto unas zonas 30 en las que no hay radares fijos para su control, lo que resulta, de esta forma, algo totalmente ineficaz".
OTRAS PROPUESTAS
Asuntos sobre la mesa
Al margen de las nuevas zonas 30, la Mesa de Movilidad debatió otros asuntos. Entre ellos, algunas propuestas de Bildu, PP y PNV.
Bildu puso sobre la mesa "la necesidad de un cambio en el modelo de gestión de los aparcamientos subterráneos y la OTA", asuntó que, según su portavoz, Oinatz Mitxelena, quedó "sobre la mesa", y para el que tanto su grupo como otros colectivos reclamaron "que la Mesa de Movilidad cuente con órdenes del día de temas concretos a debatir, para poder prepararlos bien".
El PNV, por su parte, propuso "la incorporación de la calle Larretxipi como itinerario peatonal principal dentro del Plan de Movilidad", lo que parece que fue "bien acogido", según su portavoz, Xabier Iridoy.
Por último, el PP pidió la peatonalización del puente sobre las vías que cruza desde la calle Teileria hacia en colegio Elatzeta, en Ventas. La medida, según la edil Juana de Bengoechea, "tuvo buena acogida y parece que se pondrá en marcha".
LA CIFRA
· Nuevas zonas. Las calles que Irun tiene previsto incorporar a la norma de circular a un máximo de 30 por hora, a partir de julio, serán casi todas las del núcleo urbano. Se está señalizando "la entrada y salida en zonas de circulación a 30 ya que ésta será la norma general", según detalla la edil Cristina Laborda.
· Bicis en la avenida de Navarra. Desde Kalapie, Txomin Balerdi denuncia que el Gobierno "ha desechado la idea de eliminar la línea de aparcamientos en el sentido de subida de la avenida de Navarra, para crear un bidegorri" y ahora se opta por "suprimir la mediana de esta vía y hacer pasar por ahí a las bicis, en un espacio muy estrecho".
· Radar móvil. La Policía Local de Irun es la que se encarga de vigilar el cumplimiento de la norma en las actuales zonas 30, con ayuda de un radar móvil, que se desplaza por la ciudad en uno de sus vehículos.
54%
· A menos de 30. De 13.302 vehículos controlados entre agosto y diciembre de 2011, el 54% no superab los 30 por hora y el 44% circulaba a entre 30 y 45 a la hora"
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