Cristina Laborda, la delegada municipal de Movilidad, indicaba tras la reunión de la Comisión que «estos datos reflejan, mes y medio después de la implantación de la nueva ordenación, que se ha cumplido un primer objetivo. Con la máxima cautela», advertía, «ya que llevamos poco tiempo con estas líneas, podemos señalar que, en principio, los nuevos trazados se ajustan más y mejor a las necesidades de la ciudadanía para moverse por Irun», aseguraba.

Existen diferencias en los incrementos relativos de cada línea, pero lo más destacable, sin duda, es que todas las líneas han crecido en usuarios respecto al mismo mes del año pasado, invirtiendo la tendencia general de los últimos ejercicios que se caracterizaba por una pérdida de viajeros que desembocó en la decisión de reformar los recorridos.

La Línea 1 (Zaisa-Hospital) ha aumentado en 8.547 viajes, lo que implica un 9,3% más. La Línea 2 (Ventas-Centro) ha subido en 1.795 usos, o lo que es lo mismo, ha registrado un ascenso del 9,4%, mientras que la Línea 3 ha percibido la subida más notable en números relativos, un 20%, alcanzando los 6.509 viajeros, 1.092 más que hace 12 meses. También el servicio nocturno, Gautxori, vio aumentada su cifra de pasajeros y cerró junio con 24 viajeros más, lo que supone un diferencial del 5,1% respecto al mismo mes de 2011. Cristina Laborda recordaba ayer que «ya en las conclusiones del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) se determinó que los antiguos trazados de las líneas urbanas no estaban dando respuesta a las necesidades reales de movilidad de la ciudadanía irunesa».

Así nació una propuesta del Gobierno local que no encontró apoyos para ser aprobada en Pleno. Se convirtió, eso sí, en el documento de partida sobre el que trabajaron los grupos municipales y diversas entidades ciudadanas a través de la Mesa de Movilidad. De todo aquel trabajo, surgió una nueva ordenación que fue aprobada por unanimidad entre todos los grupos municipales. El objetivo perseguido siempre fue «ofrecer un mejor servicio a los iruneses y fomentar, en definitiva, el transporte público. Por ello, estos datos que hemos conocido del mes de junio son positivos, se ajustan, al menos de momento, a los objetivos que nos habíamos marcado», valoraba ayer Cristina Laborda.

En cualquier caso, la delegada quiso insistir en la necesidad de «mantener la cautela, dado el corto periodo de tiempo que ha transcurrido desde que se pusieran en marcha los nuevos trazados».

Entre las medidas que se incluían en el dictamen por el cual el Pleno de la Corporación aprobó el nuevo diseño del servicio de autobús público urbano, estaba la de realizar revisiones periódicas sobre la marcha del servicio para, si fuera necesario, realizar nuevos ajustes al objeto de seguir mejorando las líneas, posibilidad que no está reñida con las buenas cifras recogidas en este primer mes.

Los concejales de Bildu en Irun, Oinatz Mitxelena, Juan Mari Unanue, Olatz Agirre, Jokin Melida y Juan Carlos Martínez, celebraron ayer un desayuno con la prensa para realizar balance de su primer curso político en el Ayuntamiento de Irun.

El portavoz del grupo, Oinatz Mitxelena, recordó en euskera que cuando hace un año llegaron al gobierno municipal «no teníamos conocimiento del funcionamiento interno del Ayuntamiento», por lo que «comenzamos por ahí. Un año después, todos hemos aprendido mucho»; por lo que el balance «es muy positivo». Los ediles de Bildu señalaron que han «afianzado» las relaciones con los otros grupos y destacaron que «hemos demostrado capacidad para alcanzar acuerdos». Oinatz Mitxelena recordó que en la sesión plenaria del mes de mayo el grupo consiguió sacar adelante una moción sobre los presos, «lo que fue muy importante para nosotros».

Los concejales de Bildu recordaron también el pleno de los presupuestos municipales «y la conclusión que sacamos: a la crisis nos ha llevado un modelo agotado y necesitamos uno nuevo. Sabemos que no es algo que se pueda cambiar de un día a otro», pero mostraron su «voluntad» para trabajar en este cambio de modelo. «Los presupuestos aprobados este año pertenecen a ese viejo modelo», señalaron. Cabe recordar que Bildu se abstuvo en la votación de dichas cuentas. «Cualquier cambio produce vértigo», reconoció Juan Mari Unanue, «pero en esta época de crisis, creemos en ese nuevo modelo. Creemos que hay otra forma de elaborar unos presupuestos y que se debe contar con la participación ciudadana».

Los concejales se pronunciaron asimismo en torno a la igualdad, afirmando que «todavía vivimos en un modelo patriarcal», y mostraron su interés en «hablar y buscar soluciones en torno al tema del Alarde». Recordaron asimismo su rechazo a las subcontratas y la necesidad de buscar «otro sistema de gestión».